De acuerdo con la encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, el 64 por ciento de mujeres en México son violentadas por sus parejas, novios o esposos; estadística en la que se encontraba la luchadora Dulce Sexy, quien admite que estuvo a punto de quitarse la vida debido al maltrato psicológico que vivió por parte de una de sus exparejas, pero encontró en la Lucha Libre el refugio perfecto para renacer de entre las cenizas y convertirse en una figura del pancracio, así como incursionar en el boxeo y de las artes marciales mixtas.
“Hace 14 años empecé en la Lucha Libre y fue por una depresión que tuve, donde casi pierdo la vida, estuve al borde del suicidio y la Lucha Libre me salvó, le debo absolutamente todo a este deporte tan hermoso”, contó a La Afición.
“Me envolví en el deporte de contacto, me dejé llevar por las emociones y por la adrenalina. Analicé todo lo que pasé. Fue por un maltrato psicológico por parte de una expareja. Siempre lo he dicho, las heridas sicológicas y emocionales son para toda la vida, mientras las heridas físicas se borran con el tiempo, entonces eso me hizo acercarme a los deportes de contacto. Volví a nacer cuando me subí por primera vez a un cuadrilátero, después, vino el boxeo y las artes marciales mixtas. Me encanta pelear, esa sensación de cuando tu cuerpo te pide que pares, sacas la garra y no te detienes”.
Las tres disciplinas que practica Dulce Sexy son deportes en los que domina el hombre y en el que prevalece el machismo; las oportunidades para las mujeres son a cuenta gotas y muchas veces son víctimas de acoso o maltrato, situación por la cual atravesó la gladiadora.
“Cuando llegas siempre quieren golpearte fuerte para que nos vayamos llorando a casa; eso fue lo primero que viví al enfrentar a hombres, pero yo entrené este deporte justamente para enfrentarme a hombres. A mí me llamó la atención por la situación que yo enfrenté, traía arraigada esa parte de demostrarles que no nos pueden lastimar, no pueden hacer daño, que la violencia en contra de la mujer no debe existir, que nos podemos defender y salir adelante”.
También recuerda: “fue difícil enfrentarme a esas situaciones, que me pegaran y se burlaran, y aunque me dejaran con el pecho reventado me tenía que levantar. Me recuperé de las lesiones y regresé, me aferré tanto que aquí sigo. Estoy feliz de las oportunidades que le dan a la mujer, ya no es como antes, ahorita ya hay empresas que nos dan oportunidad de peleas estelares, vamos de la mano, juntas abriéndonos camino a punta de madrazos”.
Amor compartido
Por otro lado, Dulce Sexy indicó que los tres deportes que practica son el amor de su vida, por lo que no se inclinaría por uno en especial.
“No podría inclinarme por alguna, la verdad las tres me hacen sentir emociones diferentes. En la Lucha Libre estoy en constante contacto con la gente, hay una conexión con el público que los convierte en tus cómplices, y en las peleas de MMA y Box siento que es un deporte más solitario, la preparación es diferente por las concentraciones, donde te alejas de todo. Para mí es una necesidad hacer cualquiera de estas tres disciplinas”.
¡Querer es poder!
Dulce Sexy, quien ha sobrevivido a los golpes que le ha dado la vida, les envió un mensaje a las mujeres de nuestro país, a quienes les dice ‘sí se puede’.
“La constancia y la disciplina tiene resultados favorables, hay que gritarle al mundo y a las mujeres que no tengan miedo, que el querer es poder, que los sueños se pueden hacer realidad, pero se tienen que trabajar”.
Luego de soportar un sin número de ‘costalazos’, derechazos, llaves y contrallaves, Dulce Sexy reconoció que todo lo que ha sufrido dentro del cuadrilátero ha valido la pena cuando ve a su pequeña hija de ocho años emocionarse con sus peleas.
“Ha valido la pena completamente, y ahora más porque soy mamá. Este fin de semana me junté con unas amigas, me pidieron ver mis combates, y mi hija estaba emocionada, eso me emociona inmensamente porque es feliz de tenerme como mamá, además, creo que siente mucha seguridad, porque piensa que no le pueden hacer nada porque su mamá es luchadora”.
MGC