Patricio O’Ward por fin puede respirar algo de tranquilidad. Tras el duodécimo lugar en San Petersburgo, el decimoquinto en Texas y el quinto en Long Beach, el piloto mexicano se encontró con el triunfo en Birmingham, en donde ganó el Gran Premio de Alabama.
Fue en la segunda visita a pits la que cambió el rumbo de la tarde: O’Ward, que estuvo por dos tercios de la carrera por detrás de Rinus VeeKay, encontró el momento para rebasarlo tan pronto salieron de boxes: a pesar de tener los neumáticos fríos, el de Arrow McLaren SP dejó atrás a su competidor y tomó la punta, que nunca soltó.
“Estamos peleando por el triunfo. Casi lo teníamos en la pared de los pits. Es tan difícil seguir, es un circuito con tanta fluidez, rápido… era la oportunidad. En la curva 5 lo pude hacer. Sabía que si teníamos aire limpio podía controlar la carrera. Excelente estar aquí”, reconoció O’Ward sobre su actuación en el circuito permanente de Barber Motorsports Park.
Mucho se habló de la relación con McLaren, luego de que se le negó la oportunidad para ser pilotos de pruebas en Fórmula 1, que Colton Herta fuera elegido para el puesto y que incluso había descontento por los resultados que se consiguieron con esta carrera, sobre esto, O’Ward señaló que se habló y que este triunfo es importante para ellos, al inyectarles esperanza por pelear el título de IndyCar.
“Es difícil estar en pelea con tu propio equipo. Tuvimos pláticas positivas. Lo quería hacer por mi equipo, por Arrow McLaren, para Chevy. Le damos la vuelta a la moneda. Estaba cansado, estaba decimoprimero y había que ganar para meternos en la pelea con el campeonato”, culminó.
FCM