Poco o casi nada de lo que ha vivido en los últimos años le es útil al entrenador en jefe de los Patriotas. Los nueve Super Bowls en los que ha dirigido y el tener su cuarto juego en cinco años no representan nada para él, y no ve ninguna ventaja especial en eso.
Podría sonar bastante extraña esta afirmación, quizá hasta prepotente, pero existe una razón para que Bill Belichick no considere que hay algo que haya aprendido el año pasado en la derrota frente a Filadelfia o en los dos triunfos que obtuvo al vencer a Seattle y Atlanta. Y la razón es sencilla, o al menos así la explicó.
“Realmente lo que sucedió hace dos o tres temporadas o más atrás no tiene nada que ver con lo de ahora, eso no hace diferencia y es algo que para mí no tiene importancia”, explicó Belichick. “Lo que es importante con este equipo es que los jugadores buscaron mejorar cada día, todo lo demás es distinto, porque tienes enfrente a equipos diferentes en circunstancias distintas a las de los otros años, y de hecho, estos Patriotas son distintos a los del año pasado. Así que nosotros como coaches nos tratamos de adaptar a nuestras fortalezas y debilidades y a las de los rivales, tratando de encontrar las mejores combinaciones de elementos para hacer al equipo lo mejor que se pueda”.
Las decisiones buenas o malas que haya tomado Belichick en sus experiencias pasadas están lejos de aparecer en su radar en la preparación para este choque, empezando porque al equipo que dirige es diferente. Solo como ejemplo, solo 13 de los jugadores que fueron titulares en el Super Bowl anterior son titulares en su actual escuadra, ya con esos ocho cambios, el perfil que tienen los Patriotas para nada puede ser el mismo. Además de lo anterior, está el reto tan distinto que representan los Carneros.
“Los más importante es el análisis de los Carneros. Sean (McVay) tiene un equipo que ha sido consistente en los dos últimos años, son explosivos en los equipos especiales, anotan muchos puntos y él les ha dado ese perfil que los tiene en este momento”, relató el entrenador en jefe. “Todo lo que hacen crea problemas al rival, eso es algo que el coach Sean ha sabido hacer muy bien, hacer que las defensivas sufran al enfrentarlo. La forma en que se manejan, las rutas que tienen hace que las cosas sean bastante inhóspito para el rival, sus tácticas dan otro nivel de dificultad a las defensivas contrarias y para nada repite lo que hemos visto”.