El Abierto Los Cabos ha dado un golpe certero: Daniil Medvedev, el número 2 del mundo, estará presente en esta edición que se jugará del 1 al 6 de agosto. Además, el torneo se alista para recibir público en su nueva sede, el Cabo Sports Complex, luego de disputarse a puerta cerrada en 2021. Por lo mismo Geoffrey Fernández, director de la competencia, revela que están de cara a una histórica edición, en la que además de Medvedev, habrá otros dos Top 10.
¿Cómo fue la negociación con jugadores de alto perfil como Medvedev?
Puntualmente con Medvedev, yo hace como cinco años vi la calidad que tenía y me acerqué a la ATP para el contacto de su agente y no tenía. Era el 18 del mundo, me dieron su celular y empezamos a chatear. No fue hasta Acapulco cuando lo conocí personalmente, ahí empezamos a hablar y después del tercer día estaba fascinado con el destino, con el venue y con la gente, encantado. Eso ayudó a que sintiera el respaldo de MexTenis para que se diera cuenta que hacemos las cosas serias y tomara la decisión de entablar la conversación con su agente. No fue hasta Miami que cerramos el trato con él.
Y sí, tener Acapulco y viceversa nos ayuda a entablar ese tipo de relaciones con agentes, otros torneos no tienen ese nexo. Los Cabos sufría mucho al principio, primero teníamos que presentar su ubicación, era empezar de cero. Los jugadores se han encargado de boca en boca hablar de las bondades del destino y eso nos facilita para negociar con jugadores de calidad.
Los torneos ATP 250 y 500 deben pagar una cuota a ciertos jugadores de alto perfil para que asistan a los torneos ¿Hay restricciones en montos por parte de la ATP?
Estaría fenomenal que tuviera un tope por parte de la ATP, pero cada jugador pone su cuota. Tú puedes pensar que uno vale 10, pero ellos pueden decir 200. Hay una regla no escrita, una vez que ganas un Grand Slam, tu valor incrementa considerablemente. Hay jugadores que ya son marca, que si bien tienen tiempo sin ganar algo relevante, ya construyeron su valor. Y no hay restricciones para cuántos jugadores Top 10 puede tener un torneo, podríamos tener del 1 al 10 sin problema, el tema es que me prestes dinero (risas). Afortunadamente muchos representantes en Miami se nos acercaron.
Además de la categoría, ¿cuál es la diferencia entre el AMT en Acapulco y el de Los Cabos?
Cada torneo tiene su personalidad, no porque seamos de la misma compañía quiere decir que seamos iguales. De entrada el destino es súper diferente. Los Cabos reúnen muchas cosas que no encuentras en Acapulco. Por ejemplo, el clima es seco y no húmedo, y tiene muchas cosas en pro de los jugadores. Varios juegan mucho golf y pescan, ambos deportes son característicos de Los Cabos. El público es totalmente diferente. 91 por ciento viene de Estados Unidos y Canadá, menos del 10 por ciento es nacional. Son hermanos completamente diferentes, lo único que tienen en común es que van unos tipos a jugar tenis. Al final los dos tienen esa calidez que nos caracteriza a los mexicanos y los jugadores lo notan.
¿Qué ha sido lo más difícil que te ha tocado vivir en estos seis años y lo que más has disfrutado?
Los Cabos ha sido un evento que nos ha llenado de retos. El primer año sin iniciar el primer partido nos cae una tormenta, por lo que el primer día del torneo no se juega. Dicen que es de buena suerte y estoy convencido que así es. Al año siguiente viene un remolino que nos destroza el área comercial, ambos difíciles, pero no se compara con lo que vino en la pandemia. Uno de los momentos más difíciles que me ha tocado vivir es cancelar el torneo en 2020, fue horrible y luego regresar con tantas ganas, inversión y trabajo, estábamos listos y nos dicen que a puerta cerrada. Muy complicado, uno se tiene que sobreponer anímicamente y también financieramente, porque afecta a la compañía y tuvimos pérdidas. Estamos convencidos que este año todo será diferente, vamos a salir adelante. La satisfacción más grande es poder anunciar hoy puertas abiertas y no tener a uno o dos, sino a tres Top 10.
¿Qué es lo que más va a disfrutar la gente de la nueva sede?
La nueva sede tiene una particularidad que en lo personal me encanta, el set y los elementos de construcción alrededor del venue son naturales. El contraste que tiene el destino con el mar y el desierto es maravilloso y este lugar lo potencia. Está ubicado en un lugar donde constantemente ves el mar y sopla la brisa, la construcción sobresale, pero a la vez se pierde entre la naturaleza. No me cabe la menor duda que la gente se va a enamorar, tiene un ángel muy especial. Si se suma que va a tener el mejor cuadro en la historia del torneo, se reúnen muchas cosas.
¿Qué recomendaciones han recibido por parte de la ATP para mejorar ahora que ya tienen nuevo venue?
La ATP que el año pasado estuvo ahí, quedó fascinado, pero siempre hay mucho que mejorar. Una de las recomendaciones es la luz, antes teníamos unas cazuelas, ahora todas las canchas van a ser LED, cambia radicalmente, ya lo vimos en Acapulco. Eso es un avance bárbaro y una de las recomendaciones que sin duda hay que seguir estrictamente de la ATP es siempre poner la vara muy alta año a año. Si este año tenemos tres jugadores Top 10, tenemos que mantenerlo.
FCM