Más de 40 mil espectadores presenciarán el partido de exhibición que Roger Federer ofrecerá junto Alexander Zverev este sábado en la Plaza de Toros México, juego que representará la primera aparición como profesional del suizo en tierras aztecas, no obstante, ya había tomado la raqueta en el país.
La Copa Casacablanca, torneo juvenil que se juega en el Club del mismo nombre, ubicado en Satélite, Estado de México, fue donde Roger se estrenó ante la afición mexicana hace 23 años.
En 1996 tenía 15 años, aún una promesa, cuando vino a disputar la XIX certamen que también ha visto pasar a jugadores como Juan Martín del Potro y Sam Querrey. El helvético no llegó como favorito, ni si quiera como una amenaza para los mejores sembrados, pero superó la ronda clasificación tras derrotar a cuatro mexicanos.
Una vez instalado en la ronda de 32, no pudo con el alemán Sebastien Aickele, derrota que le puso fin su aventura mexicana. En esa ocasión el chileno Nicolás Massú consiguió el galardón que cada año ambiciona los jóvenes tenistas.
Veinte títulos de Grand Slams, 103 de ATP en total y dos medallas olímpicas después, el actual número tres del mundo, dará catedra de tenis en México ante un recinto que espera con ansias su duelo contra un joven que buscará quedarse con su lugar en un futuro no muy lejano, Alexander Zverev.
Luego del sábado, los seguidores de nuestro país deberán esperar que Su Majestad acepte estar alguna vez en el Abierto Mexicano de Tenis, en Acapulco, para verlo nuevamente en suelo Tricolor.
FCM