El tenista francés Benoit Paire vivió una situación inusual este miércoles antes de su estreno en el torneo de Hamburgo (Alemania) ya que pudo jugar su partido ante el noruego Casper Ruud pese a haber dado en dos ocasiones positivo por coronavirus y luego negativo, ya que los organizadores consideraron que no era un peligro de contagio.
Paire, que ya dio positivo por el covid-19 antes del US Open a finales de agosto y que pasó el obligatorio periodo de confinamiento, jugó la semana pasada en el Masters 1000 de Roma y a su llegada a Hamburgo, dio en dos ocasiones de nuevo positivo, y luego negativo antes de su debut, que no pudo concluir al retirarse en el segundo set.
"No entiendo nada, sólo estoy cansado y sólo quiero volver a casa con mi familia", señaló Paire tras confirmar sus dos test positivos, que provocaron que el médico del torneo, Volker Carrero, tuviese que comparecer en rueda de prensa y explicar que el tenista se había adherido a todas las normas del protocolo, algo que también fue confirmado por las autoridades sanitarias de Hamburgo, que le dieron luz verde para jugar.
Carrero indicó que no era raro que aquellos que habían sufrido de coronavirus dieran positivo nuevamente, pero que estas personas, incluida Paire, no son contagiosos. "Pero eso no significa que sean infecciosos. Una prueba positiva no significa que infecte, sino solo material de virus comprobado. Sabemos por otros casos que siempre puede haber este cambio negativo-positivo-negativo. Esto no es inusual", aclaró.
ZZM