Este fin de semana se llevó a cabo el UFC 298, regalándonos una de las peleas más esperadas en la categoría femenil, pues Amanda Nunes se mediría ante Irene Aldana por el campeonato del peso gallo. La mexicana llegaba como una retadora con la que hay que tener cuidado, pues se pensaba que podría destronar a la reina de su corona, pero esto no fue así, la campeona mantuvo a la raya el poder mexicano, reteniendo lo que es suyo.
La brasileña demostró sin problemas el por qué es doble campeona del mundo en la Rogers Arena en Vancouver. Este combate fue estelar en la noche, con un entretenimiento espectacular, dejando grandes golpes y derribos que mantuvieron al espectador al filo de la butaca. En cinco rounds Amanda dejó en claro su poderío mermando a la mexicana a un grado que se veía muy lastimada.
En los primeros tres episodios del combate fue de menos a más el ataque de Nunes, primero midiendo lo que era su contrincante, conociendo el terreno para después buscar algún hueco en la guardia de su rival. La forma tan calma que notó a Irene Aldana para el tercer round la hizo volcarse al ataque, pues la mexicana tocó en varias ocasiones la lona, dejando ver quién era la campeona.
Ya para los últimos dos rounds esta historia estaba escrita, pues la agresividad de Nunes vino para el cuarto episodio, yendo siempre para delante, buscando derribar a Irene y finalizar con lo que sería su última pelea como profesional en la UFC. El último asalto cambió de estrategia a una mucho más calmada, pensando más en el contragolpe y el cuerpo a cuerpo, al parecer en este momento la brasileña sabía que esto era suyo.
Tras recibir la victoria en decisión unánime y retener su campeonato sorprendió a todo el público por anunciar su retiro: "He sido tan feliz de hacer esto, y hemos estado en este tren tanto tiempo que creo es momento de disfrutar lo que he logrado"; expresó la Leona, quien agregó: "Siempre dije que sería campeona y logré ser doblemente campeona del mundo".
DAO