Valeria Hernández Reyes es una capacitadora electoral, y en los últimos casi 4 meses y medio, y durante ese tiempo tuvo siempre capacitaciones constantes, rigurosas, donde se utilizaron métodos tradicionales y modernos, recalcando que se trata de la jornada con mayor equipo tecnológico y mayor inclusión, ya que las personas trans podrán asistir a votar sin importan ir sin su identidad biológica y las personas discapacitadas tendrán mayor facilidad.
Dijo que es la primera vez que participa desde este lado del proceso y eso le ha permitido cambiar su perspectiva, pues hoy sabe de la responsabilidad que tiene como mexicana.
En su caso, comenta que debido a su empleo, el pasado 10 de junio mientras estaba con el sellado de las boletas, su celular se mantuvo apagado, mientras que su tío perdió la vida sin que ella no se diera cuenta ni se le avisara, eso ocasionó que su familiar no recibiera la atención en 12 horas, hasta que ella salió de su turno.
“Me afectó porque murió mi tío, mientras yo estaba aquí en mi jornada, no pude estar presente cuando falleció, incluso al día siguiente tuve que comenzar el proceso funerario, porque me estaban esperando a que yo saliera de trabajar (después de 16 horas), porque tenía el teléfono apagado, fue cuando estábamos sellando las boletas”, indicó.
Valeria refiere que fue estresante, porque a la mera hora hubo a quien le dio miedo tanta responsabilidad y se echó para atrás, ocasionando que apenas la semana pasada terminará de conformar sus casillas.
“Fue estresante, porque personas que aceptaron ser funcionarios de repente me inventaron cualquier pretexto y se negaron a serlo, pero lo más gratificante es que los jóvenes y los de arriba de 75 años son los están participando”, afirmó.
Indicó que este viernes se dio el tiempo para ir a la iglesia, pues señala que necesita estar bien para el domingo, ya que estará levantada desde las 6 de la mañana y no sabe a qué hora del siguiente podrá dormir, y continuar trabajando por 8 días más.
“Hoy (viernes) hasta fui a misa, porque creí que lo necesitaba, porque sé que el domingo es compromiso total para el INE, mientras que para mi casa tuve que contratar a una persona para que cuide de mis perros y esté al tanto de mis hermanos, porque vivo sola”, dijo.
Menciona que éste viernes por la mañana, una representante de partido del PAN en Tampico (su vecina), la visitó para advertir muchas cosas, “el domingo son las elecciones y si alguien me grita yo grito más; si alguien tiene lengua, yo tengo dos y así empezó a advertirme, porque sabe que trabajo en el INE y eso sí me estresó”, manifiesta.
Mientras que para Adolfo Garibaldi Martínez, señala que es su segunda ocasión en el que trabaja como Capacitador Electoral, es soltero y eso le permitió entregarse al 100 por ciento a su actividad sin ningún problema.
A sus 45 años, comenta que a pesar de ser un proceso largo, pesado y muy demandante se siente muy triunfador, porque ha recibido una retroalimentación que le ha permitido cambiar su perspectiva, pues ahora sabe perfectamente cómo se desarrolla una jornada electoral.
“Es la segunda vez que participo y me gusta trabajar con las personas y ha sido un poco estresante, porque cuando creí que ya tenía listo todo, resulta que hubo alguien que no quiso participar y eso causó que terminará de conformar mis casillas hasta el pasado domingo”, agregó.