Hola peque, hoy queremos enseñarte algo muy útil; finanzas personales, ¿te gustaría? Saber cómo llevarse bien con el dinero no es solo para los adultos. Las finanzas personales son para todos, incluso para las y los niños como tú.
Bueno, para comenzar vamos a diferenciar entre lo que realmente es una necesidad y lo que solo es un deseo, ya que aprenderlo te permitirá comenzar con el hábito del ahorro.
¿Alguna vez has deseado algo, pero en realidad no lo necesitas? Quizá una bicicleta para no caminar cuando salgas de paseo con tus papás, o un juguete de novedad. ¿Qué tal la consola de videojuegos más reciente porque la que tienes ya pasó de moda? Quizá un iPad o un celular de última generación porque ya no te gusta el que te compraron el año pasado. A esto que tú quieres le llamamos deseo.
Por otro lado, estamos seguros de que has llegado a requerir un libro, porque te lo piden en la escuela para las tareas y con esto pasar el año; también te falta un cuaderno nuevo porque el que tienes ya está lleno; lápices y colores porque ya no les sale la punta; o zapatos o ropa nueva porque la que te pones ya está muy gastada, o unos lentes, porque tu vista puede estar disminuyendo. ¿Y qué dices de la falta de alimento? ¿Has sentido como tu cuerpo te exige comida, frutas, verduras, carne, leche? A esto le llamamos, necesidad.
Como puedes ver, hay cosas que pueden gustarte mucho y que deseas tener, aunque no las necesites, pero también hay cosas indispensables para tu salud o para tu aprendizaje que no puedes dejar de lado.
Recuerda...“No siempre debes gastar todo lo que tengas, aunque algo se te antoje. Si lo ahorras, te servirá para tener algo mejor después”.
¿Sabías que el dinero muchas veces es limitado en nuestras casas?, eso quiere decir que solo tenemos cierta cantidad, por lo que debemos pensar bien cómo gastarlo.
Vamos a poner un ejemplo. Tú deseas una nueva consola de videojuegos, aunque ya tienes una, pero a la vez necesitas unos lentes, porque tu capacidad visual ha ido disminuyendo y lo notas.
¿A qué le darías preferencia? ¿A la consola de videojuegos o a la necesidad, que son tus lentes, para que puedas ver mejor? Seguramente te decidirías por los lentes, porque es lo que más necesitas. Y sin duda es una buena decisión, porque significa que gastarás en algo que te sirve para estar bien y hacer tu vida diaria con comodidad. Necesidades Buenas decisiones. Conocer el valor del dinero y aprender a ahorrar es la base para obtener todo lo que nos hace falta y también para darnos un gusto, dice Condusef.
Pero no te desanimes, también puedes darte un gusto y cumplir tu deseo, aunque para eso debes comenzar a ahorrar.
En otras palabras, ese videojuego que deseas lo puedes comprar si ahorras. Puedes comenzar con los domingos que te dan tus papás. Guárdalos en una alcancía, te sorprenderá lo que puedes lograr con el hábito del ahorro.
¿Qué es?
El ahorro, como ya dijimos, es guardar unas monedas o billetes en una alcancía o en una cuenta de banco, de forma constante; puede ser cada semana, cada quince días o cada mes, lo importante es que adoptes esa costumbre.
Haz cuentas. Si cada domingo tus papás te dan 50 pesos para comprar dulces o un pastelillo, puedes guardar 30. Al término de un año habrás reunido mil 440 pesos, una buena cantidad, ¿no crees?, y lo puedes utilizar para eso que tanto deseas, incluso, para una emergencia. Como ves, es muy sencillo ahorrar.
Otra forma de ahorrar es conociendo los gastos hormiga. Suena a gastos muy pequeños ¿verdad? En efecto, los gastos hormiga son los que hacemos casi a diario, por ejemplo: 10 pesos en una golosina, 15 pesos en un refresco, 14 pesos en unas galletas; 18 pesos en una bolsa de papas; 30 pesos en una torta, mismos que al sumarlos nos significarían un gasto, sin darnos cuenta, de 87 pesos. Si fuera cada semana, a lo largo de un año habrás gastado 4,176 pesos. ¡Wow!, una buena parte de lo que cuesta tu nueva consola de videojuegos.
Lo cierto es que la comida, ropa, medicinas, juguetes y todo lo que necesitas y deseas cuesta dinero. Valora cada moneda o billete porque a tus papás les cuesta mucho trabajo ganarlo. Y recuerda: no siempre debes gastar todo lo que tengas.
stgs