Menú Secreto
Un ambiente exclusivo con el concepto de alta cocina en barra, creado por el chef Alejandro Daboub, es lo que encuentras en NoM, un espacio perfecto para los foodies dispuestos a experimentar.
Las comidas y cenas se sirven en una barra para 16 personas, quienes sólo pueden acceder con reservación. El menú, hecho con ingredientes de temporada, cambia cada semana, y los chefs preparan los cinco platillos frente a los comensales.
Uno de los platos estrella que nunca cambia es su waffle de foi gras con trufa negra, una delicia que vale la pena probar. Te recomendamos pagar por el menú con maridaje, los vinos italianos y franceses que ofrecen te encantarán.
Alejandro Dumas 125, Polanco, 55 8434 3888
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Tamales con madre
Este proyecto celebra el maíz nativo mexicano y la creatividad, pues la masa del tamal tiene infinitas posibilidades. Ya sean sus recetas tradicionales –pollo con salsa verde–, las especialidades –plátano macho con mole– o los de temporada –huauzontle con requesón–, con la primera mordida desaparece la idea de que los tamales son pesados o secos. Todos vienen servidos con exquisitas salsas. Por supuesto, no podía faltar el atole, que va variando (a nosotros nos tocó de zapote), y el chocolate 100% artesanal.
Tamales Madre, Liverpool 44e
Huequito para el postre
Boca es un espacio íntimo donde lo dulce es el protagonista. Su carta consta de 14 postres, de los cuales 10 son fijos y cuatro se renuevan constantemente. Además, tiene un menú degustación que incluye dos postres y dos maridajes con vino rosado o espumoso.
Si eliges un postre de vitrina, acompáñalo con cerveza artesanal, café, chocolate o bebidas sin alcohol. Te recomendamos pedir el postre de chocolate con maracuyá que tiene un sabor inolvidable.
Puebla 266, Roma