En la boyante economía del bienestar, el turismo siempre fue uno de los sectores de más rápido crecimiento antes del pandémico 2020. Hoy, el segmento ha retomado sus niveles de crecimiento, con México como uno de los más afortunados receptores de viajeros wellness.
Luego de un crecimiento sostenido —entre 2012 y 2019— de 8.6 por ciento anual de los viajes de turismo de bienestar, para alcanzar un máximo de 936.4 millones de viajes a nivel mundial y un gasto por 720 mil 400 millones de dólares (mdd), se esperaba que en 2023 por fin se rompiera la barrera prepandemia, con crecimientos de dos dígitos para llegar a 867.9 mdd en gasto y 1 millón 053 viajes, de acuerdo con el informe Una década de turismo de bienestar: primera compilación de más de 10 años de datos de mercado, publicado en marzo pasado por el Global Wellness Institute. Se prevé que este tipo de viajes aumenten hasta representar 8.3 por ciento de todos los viajes turísticos para 2027, en el mundo.
Son buenas noticias para México, al ser uno de los principales receptores de viajeros en busca de wellness del mundo, con 5.6 por ciento de participación en el rubro.
Esta nueva forma de viajar, que propone a los visitantes una serie de experiencias relacionadas con bienestar físico, mental y emocional, se ha colocado a la cabeza entre las más buscadas a la hora de definir un sitio nuevo por visitar, ya que los viajeros no solo buscan sitios por descubrir, sino espacios que les ayuden a encontrar la paz y a conectar con su yo espiritual.
Según informes del Banco Internacional de Comercio Exterior (Bancomext) y la consultora Deloitte, México se encuentra en el lugar número siete del top 20 de países receptores de turismo wellness en el mundo, y el primero en América Latina, con un mercado valuado en 10 mil mdd.
Según fuentes del segmento wellness, esto se debe en gran medida a las prácticas prehispánicas de recreación, purificación y sanación, que se han difundido en todo el mundo, así como a los spa de clase mundial que podemos encontrar prácticamente en todo el territorio mexicano y que ofrecen desde prácticas ancestrales hasta las técnicas holísticas más vanguardistas.
Los turistas estadounidenses, que según datos de la Secretaría de Turismo (Sectur) conforman la mayor parte del mercado del turismo de bienestar que llega a México, buscan actividades muy diferentes, entre ellas: 3 por ciento, terapias de relajación, saunas y masajes; 69.5 por ciento, aguas termales y balnearios; 23.5 por ciento, actividades fitness; 18.4 por ciento, tratamientos de belleza y antiedad, y 18.3 por ciento más quieren experiencias de cocina saludable, dietética o vegana. Aquí, algunos ejemplos de lo que ofrece México.
Agua Bendita, San Miguel de Allende, Guanajuato
Un espacio de total bienestar que se oculta a 15 minutos del centro de San Miguel de Allende, en un entorno privado, rodeado de extensos jardines, donde se realizan terapias, retiros espirituales, temazcales y todo tipo de eventos enfocados a la relajación.
Ubicado en el municipio de Atotonilco, este lugar cuenta con distintas áreas, ideales para una escapada individual o en grupo, ofreciendo un santuario sereno en el que los visitantes experimentan la armonía, en franca comunión con la naturaleza endémica del lugar. Desde amplios espacios al aire libre, hasta cómodas habitaciones con vistas panorámicas, cada detalle se ha desarrollado cuidadosamente para garantizar comodidad y tranquilidad.
Jasha Spa, Los Cabos, Baja California Sur
Varias veces galardonado internacionalmente, el Jasha Spa del JW Marriott Los Cabos es uno de los más grandes y completos spas de la península. Ahí, los huéspedes pueden sumergirse en una atmósfera de sanación prehispánica, inspirada en la herbolaria mexicana, con los más finos ingredientes orgánicos y en medio de un lounge de relajación. Conceptualizado por Spa Strategy, con arquitectura de la firma Olson Kundig y el diseño interior del mexicano Héctor Esrawe, este recinto incluye 12 salas de tratamiento con terrazas privadas, albercas interiores, piscina de vitalidad, vapor de agua de mar, saunas, jacuzzis, un amplio menú de tratamientos y el antiguo ritual del temazcal, así como sesiones de sound healing.
Casa del Alma, San Cristóbal de las Casas, Chiapas
En pleno corazón de San Cristóbal de las Casas, este lugar se ha convertido en un refugio de tranquilidad y rejuvenecimiento para aquellos que buscan un momento de reconexión, pues ofrece una amplia variedad de masajes terapéuticos, que van desde técnicas tradicionales prehispánicas, hasta tratamientos corporales y faciales especializados.
En este spa, los expertos aplican diversas técnicas relajantes y rejuvenecedoras, que ayudan a aliviar el estrés, revitalizar el cuerpo y relajar la mente. Además, cuentan con jacuzzi, sauna y vapor, para complementar tu experiencia de bienestar, mientras te sumerges en aguas infusionadas con hierbas curativas que desintoxican el cuerpo y alivian la respiración con sus beneficios purificadores.
Ya sea que estés buscando un momento de relajación profunda o un tratamiento terapéutico específico, este sitio te invita a desconectar y consentir tu cuerpo en un entorno sereno, armónico y acogedor.
Spa Marquis, Ciudad de México
Localizado en pleno Paseo de la Reforma, dentro del Hotel Marquis, este spa es el más grande de la Ciudad de México, con más de mil 500 metros cuadrados dedicados al bienestar de sus visitantes. Las cómodas instalaciones y su amplia variedad de tratamientos, lo hacen un lugar ideal para desconectar del caos de la agitada capital y disfrutar de una experiencia íntima en la que las luces tenues, la música personalizada y la aromaterapia, son capaces de hacerte olvidar que estás en una gran urbe.
El lugar ofrece desde faciales y masajes, hasta programas integrales para el bienestar físico, así como auténticos rituales milenarios que brindan una experiencia holística completa. Uno de los más populares es el Baño Egipcio, un ritual que inicia con una exfoliación, continuando con un baño al estilo de los antiguos faraones, en el cual las proteínas de leche y el colágeno marino acarician la piel con sus virtudes hidratantes y nutritivas.
Oriundo, Valladolid, Yucatán
En este sitio se reúnen el lujo y la naturaleza, convirtiéndolo en el escenario perfecto para vivir una experiencia enriquecedora e inolvidable, apartados de la ciudad, pero cerca de la civilización. La extraordinaria propiedad cuenta con 16 villas que se fusionan con su entorno natural, todas con habitaciones dotadas de una decoración exquisita, así como las comodidades y la tecnología de un hotel de lujo.
Entre los servicios que brinda destacan experiencias sensoriales, como tomar un baño a la luz de luna en un cenote natural que se encuentra dentro de las propias instalaciones, ya sea para disfrutar el cielo estrellado, o bien para participar en alguna ceremonia maya. También hay clases de cocina prehispánica, recorridos para aprender sobre la producción de miel de abejas meliponas, paseos en bicicleta, masajes, temazcal, yoga y excursiones para avistamiento de aves.
DJR