La semana pasada, el panorama se veía más complejo que nunca. Las empresas al otro lado de la frontera norte hacían compras express de productos mexicanos, con el temor de que se cumpliera la promesa arancelaria. Donald Trump, el presidente de Estados Unidos (EU) se mantenía firme en su intención de hacer realidad el impuesto de 5% sobre todas las exportaciones de México, con un aumento gradual hasta 25%, para frenar la migración ilegal hacia su país.
Al mismo tiempo, la delegación del gobierno mexicano negociaba contrarreloj con sus pares de Washington para alcanzar un acuerdo, y los representantes de la IP exigían una medida espejo en caso de no lograrlo.
Sin embargo, fue el mismo Trump quien se encargó de calmar las aguas el viernes por la noche, cuando fiel a su costumbre, anunció a través de Twitter que “los aranceles de 5% programados para entrar en vigor este lunes contra los productos mexicanos quedan suspendidos indefinidamente”, después de que las delegaciones de ambos países alcanzaron un acuerdo.
A cambio, México aceptó “tomar medidas contundentes para detener la marea migratoria a través de país”, escribió el mandatario de EU.
¿En qué consisten estas “medidas contundentes” a las que se comprometió el gobierno de Andrés Manuel López Obrador? Trump pide ponerle un alto a los migrantes centroamericanos que quieren cumplir el sueño americano, pero, ¿cuántos de ellos realmente atraviesan la frontera norte y cuántos se están quedando en nuestro país?
El Dato.320 mdd
gastó el gobierno mexicano para deportar a los integrantes de las caravanas
Frontera blindada
El canciller de México, Marcelo Ebrard, dijo que a partir de hoy se desplegarán 6,000 elementos de la Guardia Nacional, con especial atención en los 11 municipios de la frontera con Guatemala, a fin de prevenir el fenómeno migratorio. Asimismo, en caso de que esta medida no tenga los resultados esperados, Ebrard dijo que se emprenderán acciones adicionales.
Sin embargo, el funcionario confirmó que el pacto no incluye la polémica cláusula de "tercer país seguro", que el gobierno mexicano no estaba dispuesto a aceptar.
Dicha cláusula tiene su origen en la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, que se firmó en Ginebra, Suiza, en 1951. Consiste en que, cuando una persona abandona su país para solicitar asilo en otro, este puede rechazar su petición y enviarlo a una tercer nación que le asegure no devolverlo y le garantice algunos derechos básicos (vivienda, seguridad social, servicios médicos, empleo, educación y reunificación familiar).
Nuestro país solo se comprometió a recibir a los solicitantes de asilo mientras esperan que se tramiten sus peticiones para ingresar a EU. Asimismo, en ese tiempo se les ofrecerán oportunidades laborales en territorio nacional. A cambio, el gobierno estadounidense aceptó apoyar el Plan de Desarrollo para Centroamérica, propuesto por el gobierno de López Obrador. Además, se fortalecerá la relación bilateral a través del intercambio de información y acciones coordinadas para proteger la frontera con México.
- Te recomendamos Mexicanos no aceptamos muro ni de concreto, ni de aranceles: Conago Política
Crisis humanitaria
El fenómeno migratorio cobró relevancia a partir de las caravanas de centroamericanos que se movilizaron hacia México el año pasado, por las condiciones de violencia y desigualdad en sus países de origen. Se calcula que el gobierno mexicano gastó más de 320 millones de pesos (mdp) en 2018 para deportar a los integrantes de las caravanas.
El problema continúa este año, pero la inversión del gobierno se redujo: apenas 9,335,000 pesos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Migración. También disminuyó el gasto en alimentación y atención médica para los migrantes.
“Desde marzo hasta abril se registraron más de 100,000 detenciones en la frontera suroeste de EU, y se alcanzaron 348,000 en lo que va del año”, dice Sergio Luna, analista de Citibanamex.
El especialista añade que “el flujo de detenidos proveniente de Guatemala, Honduras y El Salvador podría ser equivalente a casi 1.2% de la población combinada de estos tres países”.
Por su parte, México detuvo a cerca de 500 migrantes en Chiapas la semana pasada, quienes intentaban ingresar a territorio mexicano y fueron interceptados por agentes migratorios, de la Policía Federal y la Secretaría de la Defensa Nacional. En medio de las negociaciones con EU, las autoridades del país también detuvieron a Irineo Mújica y Cristóbal Sánchez, dos presuntos líderes de caravanas acusados de tráfico de migrantes.
Larry Rubin, representante del partido Republicano de EU, remarcó la importancia de llegar a una solución en el tema migratorio, que ha sido clave en la agenda de Trump desde su campaña por la presidencia. “El número (de migrantes) se ha duplicado, lo que causa un problema en la frontera norte, es problema de una crisis humanitaria. México y EU cooperan en un tema que es vital para ambos”.
El Dato.348,000 migrantes
han sido detenidos en México en lo que va del año
El comercio respira
El acuerdo aleja definitivamente la amenaza sobre la economía mexicana, cuya dependencia de las exportaciones al vecino del norte la volvía muy vulnerable a los aranceles. Por su parte, EU evita un efecto boomerang, ya que las tarifas incrementarían los precios de los productos.
Además de México, los estados de EU que respiran tranquilos son Michigan, California, Illinois, Ohio y Arizona, entre otros, cuya economía depende en gran medida de las exportaciones a México.
En el caso de Arizona, por ejemplo, 40% de sus importaciones totales provienen de nuestro país. Otros estados que habrían resentido los aranceles son Michigan, (38% de las importaciones); Texas (35%) y Nuevo México (31%), a los que les vendemos principalmente automóviles, petróleo, productos eléctricos, maquinaria y frutas. El año pasado, nuestro país exportó 346,500 millones de dólares (mdd) en productos a su vecino del norte, de acuerdo con la Oficina del Censo de EU. Las exportaciones estadounidenses a México alcanzaron un total de 265,000 mdd.
La inercia positiva continúa este año, ya que en abril, las ventas externas mexicanas sumaron 30,381 mdd, un alza interanual de 7.8%, de acuerdo con la Oficina del Censo de Estados Unidos. Se trata de un ritmo de crecimiento mayor al que registraron China y Canadá en las exportaciones hacia EU.
Al final, la economía mexicana logró salir bien librada del conflicto comercial. Los esfuerzos ahora se trasladarán al fenómeno migratorio.