Para Adam Brody, ponerse el traje acolchado de superhéroe en Shazam! y su secuela es un sueño hecho realidad.
“Siempre quise interpretar a un superhéroe. Crecí leyendo cómics”, recordó el actor en una entrevista reciente. "Quería estar en algo de ese tamaño y escala también, estar en un set tan grande, estar en atuendos que toman tanto tiempo para hacer y poner".
Describió ¡Shazam! Fury of the Gods, que se estrenará el viernes, como “simplemente una verdadera película a gran escala del tamaño de Cecil B. DeMille”.
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La película gira en torno a un grupo de hermanos adoptivos que hacen malabares con ser adolescentes y superhéroes adultos. Brody interpreta la versión adulta de un personaje geek e incómodo, pero el actor revela que era un "vagabundo de la playa" en la escuela secundaria.
“En realidad, yo era una especie de atleta”, sonríe Brody. “De cualquier manera, los surfistas son deportistas”.
Durante esos años de adolescencia, antes de dejar su ciudad natal en San Diego, California, Brody trabajó en una tienda de alquiler de videos Blockbuster. Sumado a su larga carrera como actor de décadas y podría decir que el hombre de 43 años es una especie de experto en cine.
“Tengo opiniones, pero ya sabes, no soy un Tarantino. No tengo un conocimiento enciclopédico de todas las películas”, se apresura a especificar.
En los últimos años, su conocimiento cinematográfico se ha expandido a un territorio amigable para los niños. Brody tiene dos hijos con su esposa, la actriz Leighton Meester.
“Por muchos buenos que creas que hay, no hay suficientes. Tan difícil de conseguir”, dice Brody sobre las películas para niños, que según él son “donde los valores y las lecciones realmente entran en juego y lo ideal es asegurarse de que lo que están viendo sea nutritivo”.
Si bien la filmografía de Brody no incluye películas para niños en este momento, dice que es una categoría que le gustaría probar.
“Soy fanático de todos los géneros. No hay un género que no haría o que no quisiera hacer, pero busco inteligencia en la escritura y, potencialmente, también profundidad y una voz, un fuerte POV, punto de vista”, dice.
Además, explica que busca guiones inteligentes que presenten algo positivo en el mundo y no "glorifiquen nada demasiado negativo".
“No todo tiene que ser una lección de vida”, dice. “Pero cuanto más inteligente es el proyecto, probablemente menos hace. Sabes, creo que muchas de las cosas malas que Hollywood pública son inconscientes más que conscientes y cuanto más profundo piensa alguien sobre su trabajo, probablemente más positivo o esclarecedor puede ser”.
jk