Con aplausos y público de pie el Tribeca Film Festival recibió al realizador mexicano Guillermo del Toro, quien charló sobre el amor, el horror y lo sobrenatural con el actor y presentador Alec Baldwin.
Durante 60 minutos los asistentes disfrutaron de la conversación en el Teatro Stella Artois como parte de las actividades de la edición 18 del encuentro que se celebra en Nueva York, en el que se presentarán las películas mexicanas Esto no es Berlín, de Hari Sama, y Huachicolero, de Edgar Nito.
Considerado uno de los artistas más originales y visionarios de hoy en día, Del Toro conversó sobre su prolífica carrera y cómo transformó el horror y lo sobrenatural en hermosas películas.
El director tapatío, quien quería ser biólogo marino, recordó que desde la infancia amó al cine y a los monstruos que presentaba, además de que leyó a Ray Bradbury, Juan Rulfo y Jorge Luis Borges.
Subrayó que todas sus películas “tratan sobre amar a alguien sin importar qué. Si todos aceptáramos las imperfecciones el mundo sería mejor”, y reveló que para el romance que presentó en La forma del agua, su cinta más reciente, ganadora de cuatro premios Oscar, incluidos Mejor Película y Mejor Director, vio mucho el trabajo de los hermanos Albert y David Maysles, sobre todo Salesman.
Del Toro reconoció que durante los castings se fija mucho en los ojos, pues éstos le darán lo que busca en las escenas que graba una sola vez; “es como filmar un accidente, solo tienes una oportunidad”.
“Los actores agradecemos que un director sea claro sobre lo que quiere. Nos contratan para que ustedes nos digan qué hacer. Nuestro trabajo es que ustedes consigan lo que necesitan”, expresó Baldwin en su oportunidad.
“Soy insaciable. No estoy de este tamaño por restringirme”, aseguró el director de Cronos, Mimic, El espinazo del diablo, Hellboy y Pacific Rim, quien trabaja en la creación de una escuela de animación que está por abrir en Guadalajara, Jalisco, en la parte oeste de México.
DIGL