Reflexionar sobre la maternidad, los embarazos no deseados, la infertilidad, el aborto y las decisiones personales que envuelven estos procesos se convirtieron en la premisa de Latido, la nueva película de Katina Medina Mora que compite en el Festival Internacional de Cine de Morelia. La historia cuenta con las actuaciones de Marina de Tavira y Camila Calónico.
La historia surgió “de dos semillas, una era el cuestionamiento de la maternidad, un poco propio, escribí este guion para Marina y qué bueno que le gustó. Era una película con un cuestionamiento alrededor del aborto ilegal en nuestro país, de cómo se obliga a adolescentes a llegar al término del embarazo cuando no se quiere”, dijo Katina Medina.
“Por otro lado, tenemos el tema de la infertilidad, esa parte médica que se siente muy fría y sobre todo por los tratamientos tan complejos. Estamos viendo el tema de la maternidad en situaciones opuestas, es hablar de cómo la maternidad se puede ver desde dos puntos de vista distintos, una mujer de 45 años que lo desea y una adolescente que no”, agregó.
Latido cuenta la historia de dos mujeres y sus decisiones respecto a la maternidad. Leonor es una mujer que por un tiempo considerable ha buscado ser madre, sin lograrlo; y Emilia es una joven bailarina que ve truncado su futuro por un embarazo no deseado. La historia surge de un proceso personal de la cineasta, cuando se cuestionó su propia maternidad.
“En mi proceso personal pensé que quería ser madre, pero de unos años para acá se ha dejado de romantizar, porque se habla de la maternidad desde un punto de vista hermoso, que sí lo puede ser, pero no vemos que también hay una paternidad ausente, el proceso que yo pasé a mis 40 años es algo que deberían pasar las jóvenes desde los veinte”, dijo.
“Deberían pensar lo complejo, algunas amigas me hablaban con honestidad de cosas que no le decían a nadie, que se perdían, pero de eso no se habla porque la maternidad debe ser hermosa, porque no se habla de la depresión postparto o la culpa por ir a trabajar. Siempre digo que si fuera hombre sí habría tenido hijos, siendo mujer no lo pensé”, agregó.
Inna Payán está detrás de la producción de Latido, la responsable de otras historias como Los lobos y La jaula de oro explicó que, con esta historia, sí buscó una representación femenina por la naturaleza del proyecto, “esta representación de nosotras está empezando a ser por nosotras, porque lo habitual era la parte masculina viendo la femenina”, explicó.
De acuerdo a Katina, Latido surgió de su pluma con la intención de que Marina de Tavira se convirtiera en la protagonista, “qué bueno que le gustó esta historia, porque no veía a nadie más en este personaje”, explicó la cineasta; mientras Marina complementó con un agradecimiento por conectar con un personaje como Leonor, “era un proceso distinto a mi experiencia personal y ahora se me abrió esta ventana para conectar con Leonor”.
“Es la primera vez que me escriben un proyecto, fue interesante conocer el proceso que vive una mujer que busca el embarazo y fracasa, abrí un mundo de lo que significa la experiencia de la maternidad desde ese lugar, leí testimonios e información sobre este proceso que las mujeres viven en solitario, porque se vuelve pesado para sus parejas”, dijo la actriz.
Latido llegará a salas de cine el próximo año, antes de tener su estreno en plataformas digitales. En el Festival Internacional de Cine de Morelia compite por el Ojo FICM, el premio principal de la sección Largometraje mexicano, mismo que buscan otras historias como No voy a pedirle a nadie que me crea, Temporada de huracanes, Tótem, entre otras.
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