"No es cine": Michel Franco arremete contra las películas de superhéroes

Festival de Cine de Venecia

"No soporto ver una película en la que no hay giros, en la que se usa una fórmula que te dicten los primeros diez minutos quién es el bueno, quién es malo y qué es lo que va a pasar, y te asegura que el final es satisfactorio", dijo el realizador.

El realizador se encuentra en el Festival de Cine de Venecia. (EFE)
Editorial Milenio
Venecia /

Desde su participación en el Festival de Cine de Veneciadonde estrenará la cinta Sundown, el mexicano Michel Franco asegura que es un buen momento para el cine latino - "No hay otra región (del mundo) que tenga la potencia del cine iberoamericano" -, además de lanzar una crítica a las películas de superhéroes.

El realizador compite con esa obra y también como productor de La caja, de su amigo el venezolano Lorenzo Vigas, en una Mostra en la que también están el chileno Pablo Larraín, los argentinos Gastón Duprat y Marcelo Cohn y el español Pedro Almodóvar.

El suyo es un regreso después de hacerse el año pasado con el León de Plata por la impactante Nuevo Orden, aunque ahora lo hace con una apuesta más introspectiva pero llena también de suspenso.

Sundown es el ocaso de una rica familia británica, encabezada por Neil (Tim Roth) y Alice (Charlotte Gainsbourg), que veranea en un Acapulco hasta que una tragedia inesperada interrumpe el asueto y divide a la familia, revelando tensiones del todo inesperadas.

En el largometraje Roth, con quien ha vuelto a trabajar después de contar con él en la exitosa Chronic (2015), es una especie de "extranjero" nihilista en un mundo inhóspito y violento, por el que deambula sin plantearse los riesgos que entraña.

Franco (Ciudad de México, 1979) pensó en este proyecto en medio de una crisis personal y la redacción del guion le llevó solo dos semanas, casi redimiendo su angustia: "Al entrar en ciertos temas encuentras algún tipo de satisfacción para poder seguir adelante".

Es una más de las numerosas historias que, asegura, rondan por su cabeza desde hace tiempo porque tiene "suficientes películas para los próximos no se cuántos años", afirma sentado en la azotea del hotel veneciano.

Sus historias nacen siempre de su puño letra pues cree que el artista debe redactar sus obras contra la moda de las súperproducciones: "No concibo el cine no escrito por el propio director", apunta.

"Todos los directores que me interesan son autores. Claro que dirigiría algo que no he escrito siempre y cuando llegue por alguna lógica y me interese, pero es difícil porque normalmente viene de mis obsesiones, de mis miedos, de mis gustos. Tengo suficientes películas en mi cabeza para no buscar en otro lado", promete.

Porque el arte, en resumidas cuentas, está también para eso, para lidiar con ciertas inquietudes o anhelos.

Las películas de superhéroes

Lo que no contempla es ponerse a las órdenes de las grandes casas productoras para rodar las historias de superhéroes tan de moda en estos tiempos: "Nunca digas nunca porque la vida puede dar giros, pero no me interesan lo más mínimo, no es cine", zanja, dejando escapar una carcajada que suena a declaración de principios.

"No soporto ver una película en la que no hay giros, en la que se usa una fórmula que te dicten los primeros diez minutos quién es el bueno, quién es malo y qué es lo que va a pasar y te asegura que el final es satisfactorio. Odio ese cine", señala tajante.

Es el estilo artístico que más le seduce y pone dos ejemplos claros: Viridiana (1961) de Luis Buñuel y el estilo del surcoreando Bong Joon-ho, Oscar por Parasite y que este año preside el jurado que fallará los galardones de la Mostra veneciana.

El director de Después de Lucía (2012) dice que su inspiración es la calle, bajar al barro, y niega vivir lejos de la realidad como le reprochan en su país, alegando que sus rodajes son muchas veces en áreas marginales como demuestra, por ejemplo, A los ojos (2013).

Pero no solo nutre su imaginario en el día a día. En los últimos tiempos la literatura ocupa gran parte de su tiempo, como compete a todo buen guionista.

"Trato de leer mucho porque de joven desgraciadamente leí muy poco. Entonces ahora trato de recuperar el tiempo y la inspiración viene más de la literatura que del cine", revela.

Entre sus libros de referencia están los de Philip Roth, Saul Bellow o Fiódor Dostoyevski pero especialmente Juan Rulfo: "Sus libros son un milagro", concluye.

hc

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