Stephen King es considerado como el rey de la literatura de terror gracias a sus legendarias obras. Para muchos sigue siendo sorprendente facilidad con la que ha creado grandes personajes e historias a lo largo de todos estos años, sin embargo, el trasfondo de su éxito podría no ser tan maravilloso como muchos se lo imaginan.
A lo largo de estas décadas como escritor, King ha presentado grandes personajes que luego se volvieron un éxito en la pantalla grande como Pennywise, Annie Wilkes, Jack Torrance y muchos más, lo que muchos desconocen es que muchos de ellos podrían estar basados en traumas de su infancia.
La niñez de Stephen King fue bastante dura a comparación de la de cualquiera de sus otros compañeros, pues luego de que su padre lo abandonara junto a su madre y sus hermanos, tuvo que trabajar desde muy pequeño en una estación de servicio.
Además, cuando King era niño vivió uno de los sucesos más traumantes de su vida, incluso el escritor detalla que fue borrado de su mente y solo lo recuerda porque su madre se lo contó. Según lo contado por él mismo, vio morir a su amigo de la infancia.
"El evento ocurrió cuando apenas tenía cuatro años. Según mamá, me había ido a jugar a la casa de un vecino, una casa que estaba cerca de una línea de ferrocarril. Alrededor de una hora después de que me fui, volví ‘blanco como un fantasma’", recuerda el escritor en su libro Danza macabra.
Añadió: "Resulta que el niño con el que había estado jugando había sido atropellado por un tren mientras jugaba o cruzaba las vías".
Algunos escritores especulan que este traumático incidente sirvió como inspiración para el libro The Boy, que años más tarde se adaptó a la película Stand By Me de 1986, en la que cuatro amigos adolescentes inician una expedición para llegar al lugar donde se encuentra el cadáver de un chico junto a las vías del tren.
jk