Aunque su sobrepeso le ha dado un sello característico en televisión y fue motivo de personajes cómicos, Sheyla se encuentra en una etapa de su vida donde trabaja por su salud y por alcanzar sus metas en el ámbito musical.
De pesar 137 kilos, la cantante ha perdido más de 60 a raíz de una cirugía a la que se sometió hace seis años y ahora continúa su tratamiento a base de dieta y ejercicio.
"He bajado como una persona, 61 kilos más o menos. Me ha costado, ya no tanto la inversión sino la voluntad, me hice una cirugía hace como y bajé cuarenta y tantos kilos, lo demás con dieta y ejercicio, echándole ganas porque las cirugías no lo hacen todo por uno, lo de más han sido cirugías para darme una estética que sea más agradable a la vista", aseguró la cantante.
"Quiero bajar al menos 20 kilos más, no aspiro a ser flaca talla cero, ni una talla 5, porque yo sé el tipo de huesos que tengo, pero de pesar 137 kg. a estar en 81 hay mucha diferencia, vamos muy bien, le estamos echando ganas", agregó.
Los motivos que la llevaron a poner énfasis en el cuidado de su salud están ligados al interés en su bienestar y a las nuevas metas artísticas que tiene en mente.
"Yo lo hice por salud, siempre fui gordita desde bebé y he seguido batallando con la tiroides. Para la gente que estamos entradas en carnes es una lucha, pero hay que echarle ganas, el 11 de junio sale el lanzamiento en iTunes y plataformas digitales de "Olvídame" y el nuevo video al estilo chicano en Estados Unidos, vamos a seguir trabajando", declaró.
En planes próximos la cantante trabaja en su participación durante la marcha gay a finales de junio y en terminar el disco de banda que dejó inconcluso; espera tenerlo listo en septiembre.