Es bueno saber que en muchos rincones del mundo, existen personas buenas que están dispuestas a cambiar por completo la vida de un animal que no ha pasado más que malos tratos y experiencias tristes. Tal fue el caso de Ana Bárbara, quien, mientras viajaba en carretera hacia la Ciudad de México, en donde pasará algunos días, se detuvo para rescatar a una perrita que deambulaba triste por una caseta.
En sus historias de Instagram, que han sido recopiladas y reproducidas por varios usuarios de redes sociales, se puede ver a la cantante acariciar a una perrita blanca que se acercó a ella y sus acompañantes, entre los que se encontraba su hijo mayor, para recibir amor, y quizá, un poco de comida.
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En los clips, la cantante pregunta constantemente a su hijo si deberían llevarse a la perrita, y él contesta afirmativamente, luego de eso, se ve a la cantante alimentando a la perrita con una lata de alimento para perros, mientras le preguntaba constantemente "¿Quieres vivir en LA?" en donde actualmente reside ella.
Luego, en el siguiente grupo de historias, Ana Bárbara confiesa que ya se habían ido, pero que se arrepintieron y, de reversa, regresaron por la pequeña Paloma, como la habían bautizado los empleados de la caseta, quienes la cuidaron desde que la abandonaron en aquél lugar.
Ana Bárbara consiguió una caja, la cargó, la metió en ella y luego la subió a su camioneta, en donde, agradecida, calientita y cómoda por fin, la perrita se relajó y tomó una larga siesta, mientras la famosa le cantaba.
Más adelante, ya cómodos en donde se quedarán, todos le dieron un baño a la perrita en una tina de baño, mientras Ana Bárbara bromeaba con que ni ella se metía a esas tinas por su falta de tiempo y comentó que "uno nunca sabe para quién trabaja".
Más adelante, la cantante afirmó que habían llevado a la perrita, rebautizada como Luna al veterinario, para asegurarse de que estaba bien y de que tuviera una vida feliz, a comparación de todas las dificultades a las que se había enfrentado sola luego de ser abandonada.
cjr