Cada película tiene el poder de cambiar la forma en que vemos a los héroes en pantalla, y Chris Pratt lo hizo de manera muy especial. Antes de su papel como Star-Lord en Guardianes de la Galaxia, los protagonistas de acción solían ser serios, oscuros y llenos de dramatismo.
Pratt irrumpió con un estilo fresco, divertido y carismático, mostrando que un héroe podía tener humor, fallar y seguir siendo impresionante.
Glen Powell reconoce que ese cambio abrió nuevas puertas para los actores, permitiéndoles explorar personajes más ligeros y llenos de personalidad sin perder fuerza en la pantalla.
¿Qué dijo exactamente Glen Powell sobre el contraste con los héroes tradicionales?
Powell recordó que antes de Guardianes de la Galaxia, los protagonistas de acción solían estar muy cargados emocionalmente, muchas veces oscuros, compasivos dándose golpes internos.
Pero cuando Chris Pratt apareció como Peter Quill, trajo una vibra distinta, menos peso dramático, más sonrisa, más chispa.
¿Cómo ha influido eso en la carrera de Powell?
Ha influido bastantes pues el actor dice que gracias a ese cambio pudo salirse de papeles muy rígidos, de los tipos duros o del vecino genérico.
Ha hecho comedias, acción con humor como 'Hit Man' o 'Twisters' donde su forma de ser más ligera funciona perfecto. Y ojo porque pronto lo veremos en 'The Running Man', que sí será algo más serio, lo que demuestra que ya puede balancear lo divertido con lo intenso.
¿Qué significa esto para los héroes en pantalla?
Este cambio implica que el modelo de héroe no tiene que estar siempre serio, oscuro o introspectivo. Que se le da lugar al que puede bromear, al que se equivoca, al que no siempre está impecable.
Y eso abre espacio para más variedad, más autenticidad, para que muchos actores se vean reflejados sin tener que forzar una fachada de tipo duro.
APP