Katy Perry sigue sorprendiendo a sus fans, pues recién cumplió 36 años y éste fue el primer cumpleaños que pasa siendo madre de la pequeña Daisy Dove, hija también del actor Orlando Bloom. A pesar de que la cantante se ha mostrado con sus fans al natural, sin pretender lucir irreal tras haber traído al mundo a un bebé, recientemente un paparazzi la captó mientras salía a dar un paseo con su perro, en la que lucía muy distinta a lo que se “espera de una estrella”.
A través de redes sociales, comenzó a circular una imagen en la que Katy Perry tras tener un hijo, en los alrededores de su casa en Montecito, California. En las fotos, la cantante aparece con pants azules holgados.
Despreocupada y sin pretender aparecer con una figura irreal, Katy Perry no tiene pena en mostrar la verdadera etapa post embarazo, en la que el cuerpo se transforma. Y es que es común que las famosas muestren casi a semanas de tener un bebé sus estrictas dietas, fajas o rutinas para recuperar su figura.
Sin embargo, esta vez, Katy Perry demostró que no hay obligación de ser de alguna forma para entrar en los cánones de belleza.
grb