Talina Fernández fue hospitalizada de emergencia el pasado sábado y falleció este miércoles 28 de junio. Padecía leucemia terminal. Junto a la tristeza de su partida, dejó un gran legado en el periodismo y el entretenimiento de radio y televisión en México.
Conductora, locutora y reportera, Fernández pasó toda una vida en la televisión, donde logró el mote de La dama del buen decir debido a su amplio vocabulario y gran cultura. Dentro de esta larga trayectoria destacó en diversas facetas por su extenso bagaje.
Talina Fernández, entrañable para el público mexicano luego del fallecimiento de su hija, la también famosa Mariana Levy, de quien supo de su muerte mientras realizaba un programa matutino de Televisa.
¿Quién fue Talina Fernández?
Talina Fernández nació el 2 de agosto de 1944 en el Hospital Inglés, en la Colonia Anzures de la Ciudad de México. Más tarde, hizo sus estudios de educación básica en el Colegio Alemán, una de las instituciones más prestigiosas de México.
Se le conocía como La dama del buen decir, apelativo que adoptó desde su participación en el programa Noche a Noche, donde su cultura y conocimientos —hablaba tres idiomas: inglés, francés y alemán— se reflejaban en las entrevistas que hacía; aunque más de una vez ella reconocía que era “muy mal hablada”.
Su historia en la televisión inició en 1970, cuando Raúl Astor la descubrió y la integró a su programa de variedades La Cosquilla, pero la vida también la llevó por el terreno de las noticias. Talina contó en algunas entrevistas que empezó haciendo deportes, área que no le gustaba; y en ese andar se gestó lo que sería su mayor y mejor cobertura por la trascendencia del hecho.
El reporte que dio a Jacobo Zabludowsky de la muerte de Luis Donaldo Colosio, candidato del PRI a la presidencia de la República el 23 de marzo de 1994. Sin embargo, esa noticia le provocó un gran conflicto, ya que era amiga de Diana Laura, la esposa del candidato; en más de una ocasión confesó que el hecho la puso “en un gran conflicto” entre su trabajo y la amistad.
Talina, la mujer de la voz ronca, que asumía cada vez era más grave “por el cigarro”, también probó suerte en las telenovelas: títulos como Muchachita, Tenías que ser tú y Las gemelas dan registro de su habilidad histriónica.
Su fuerte fue la conducción en donde a petición de “mi patrón”, como llamaba a Emilio Azcárraga Milmo hizo dos programas que le tenían un especial significado.
Uno fue Viva el domingo, “un programa genial: lo escribía Germán Dehesa, y estaba conmigo Héctor Bonilla, Nacho Méndez y Beatriz Adriana. Fue el programa más inteligente que hice toda mi vida, duró 13 programas”, dijo Talina en una entrevista a Mara Patricia Castañeda.
El otro encargo de El Tigre fue Caras y gestos. “Me llama mi patrón y me dice: ‘Hazme un concurso una vez a la semana, tú lo produces’. Y me acordé de Dígalo con mímica. Ahí yo escribía y también era la conductora, y recuerdo que ahorré dinero y me fui con Mario de la Piedra (productor), a quien le entregué ese ahorro, y al día siguiente me dicen que me bajaron el presupuesto”, contó la conductora.
En su filosofía de adaptarse a los cambios, directa y transparente como era, Talina cuestionó a Emilio Azcárraga Jean, cuando este hizo su presentación con el personal de su empresa, al asumir la presidencia de Televisa.
“Con tu papá éramos priistas y le teníamos que ir al América, ¿ahora será igual, a quién le iremos?”, preguntó ante el asombro de sus compañeros y obteniendo como respuesta inmediata: “A México”.
Talina condujo Noche a noche (1983), uno de los programas estelares de la televisión mexicana. En 1984, trabaja como actriz de teatro en la comedia musical Todo se vale, junto con el actor y director Rafael Banquells.
En la década de los 80, los éxitos continúan para Talina. Participó en una gran gama de programas televisivos, en los que se convirtió en las primeras VJ de la televisión mexicana en programas musicales como Vi, video, vencí (1988) y Gana video (1989). A fines de los 80 y principios de los 90, Talina también fungió como titular de los programas nocturnos Nuevas noches y Rim bom video.
Una mujer que siempre abría los brazos al amor
En el terreno personal, Talina decía que era una mujer que siempre abría los brazos al amor; por lo que a pesar de los fuertes golpes que le dio la vida, como la sorpresiva muerte de su hija Mariana (29 de abril de 2005), e incluso de los tumores que padeció (meningioma y glioma del ponte, que explicó a Adela Micha en entrevista) siempre tenía una actitud positiva, congruente con la filosofía que la distinguió; por lo que, a pesar de que no ejerció la profesión que eligió —enfermería— “para hacer reír a la gente que me viera”, a través de la conducción “Dios me puso en donde pudiera llegar a más gente con el corazón, porque así lo he hecho toda la vida”.
DMZ