La vida de Paquita la del Barrio, la querida intérprete mexicana de 'Rata de dos patas', estuvo profundamente marcada por el desamor, un sentimiento que plasmó en sus icónicas canciones.
Lo que pocos saben es que la cantante, originaria de Veracruz, tuvo dos matrimonios a lo largo de su vida. En MILENIO te contamos quiénes fueron los grandes amores que dejaron huella en su historia.

- Te recomendamos Muerte de Paquita la del Barrio; Sigue AQUÍ últimas noticias hoy 17 de febrero | EN VIVO Famosos

¿Quiénes son las parejas de Paquita la del Barrio y por qué los odiaba?
Paquita la del Barrio, cuyo nombre real era Francisca Viveros Barradas, tuvo dos esposos a lo largo de su vida.
Su historia personal estuvo marcada por relaciones sentimentales difíciles y desafiantes, reflejadas en las letras de sus canciones más emblemáticas.
Miguel Gerardo Martínez
Paquita conoció a Miguel Gerardo Martínez en Alto Lucero, Veracruz, cuando tenía 16 años y trabajaba en el Registro Civil. Miguel, quien se desempeñaba como Tesorero de la Presidencia Municipal, era 28 años mayor que ella.
A pesar de la diferencia de edad, se casaron y tuvieron dos hijos: Miguel Gerardo Viveros y Javier Gerardo Viveros.
Sin embargo, Paquita descubrió que Miguel ya estaba casado y tenía otra familia. Tras esta dolorosa revelación, decidió dejarlo y mudarse a la Ciudad de México en busca de una nueva vida.
Alfonso Martínez
En 1970, tras su llegada a la Ciudad de México, Paquita comenzó a cantar en restaurantes y bares, donde conoció a Alfonso Martínez, el dueño de un restaurante. Se casaron en 1975 y su relación duró más de 30 años, hasta la muerte de Alfonso en 1997.
Sin embargo, el matrimonio estuvo lleno de altibajos. Alfonso fue infiel en múltiples ocasiones e incluso llegó a robar comida del restaurante de Paquita para venderla y darle el dinero a su amante.
En 1977, la cantante quedó embarazada de gemelos, pero lamentablemente los bebés fallecieron poco después de nacer.
A pesar de las traiciones y dificultades, estas relaciones dejaron una huella imborrable en la vida y la música de Paquita la del Barrio, convirtiéndola en un ícono de la lucha contra el desamor y la infidelidad.