A lo largo de la historia de la música mexicana pocas agrupaciones pueden presumir una trayectoria tan exitosa como la ha tenido La Sonora Santanera. Por décadas, la agrupación les ha dado un singular acompañamiento musical a los mexicanos, con canciones icónicas que han perdurado en el gusto de la gente.
Sin embargo, la historia de La Sonora Santanera ha experimentado tragos verdaderamente amargos como la muerte de Carlos Colorado, músico y compositor mexicano, fundador de la agrupación, luego de un fatal accidente en carretera.
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Fue durante una entrevista con Matilde Obregón que Arturo Ortiz, miembro de La Sonora Santanera recordó aquel fatídico día cuando se dirigían a Tampico, pero antes, haciendo una escala en Aguascalientes. Él reveló que el día de la muerte de Carlos, el fundador de la Santanera no quería ir porque no se sentía del todo bien ya que hace un año había muerto su hijo.
Por cosas de la vida, al último momento se decidió por asistir al evento y ese sería su último viaje.
"Fue una mañana muy dolorosa. Un año antes había perdido un hijo en un accidente, entonces dijo 'me siento mal, dile a los demás que yo no voy a ir'. Íbamos de Aguascalientes a Tampico, pero de última hora sí quiso". Pasamos por él a su casa y rumbo a Querétaro vino un accidente muy doloroso en donde el maestro pierde la vida", dijo.
Luego de ese trágico día, las enseñanzas de Colorado, recuerda Arturo los han acompañado y guiado para ser una mejor agrupación.
"Nos dejó una gran enseñanza muy grande de cómo manejarnos, de cómo conducir el grupo. Estamos muy a la vista de la gente. Nunca dejamos de trabajar y tenemos un gran compromiso y mantener vigente la tradición", continuó.
Finalmente, Arturo mostró dentro de las oficinas de La Sonora Santanera, una capilla en donde cada uno de los integrantes agradece cada que llegan y cada que se van a una presentación.
"Es el lugar más sagrado porque aquí nos venimos a encomendar a Dios cuando salimos y también cuando llegamos", finalizó.
DAG