"Otro día sin fiebre, ni tos, y eso es bueno, gracias a Dios", escribe Rubén Blades en Diario de la peste, la bitácora que el cantautor panameño está realizando sobre su experiencia personal respecto a la pandemia de Covid-19.
Blades habita junto con su esposa, Luba Mason, en Nueva York, una ciudad que, debido al coronavirus, "sigue moviéndose, pero a un ritmo muchísimo mas lento que el usual".
El ganador de 17 premios Grammy percibe este flagelo global "como una prueba mas en la prodigiosa cadena de experimentos, intentos, actos y omisiones que componen la existencia de la humanidad".
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Rubén inició el diario el pasado 17 de marzo con una serie de recomendaciones para evitar la propagación del virus, por ejemplo: tener siempre un pañuelo disponible y lavarse las manos frecuentemente.
"Estoy pensando en todos mis amigos, en tanta gente que nos demuestra afecto, en la gente que no conozco y que quisiera conocer algún día. En la gente que esta sola, que no tiene las opciones y ventajas que nos ayudan a tener calma y a sentir optimismo. Pero en este examen, nadie esta ni estará solo", fue lo que el latino escribió en su segunda publicación, el 18 de marzo.
En los textos, el cantante aborda su situación actual, mezclada con recuerdos. "Recuerdo un período así de difícil, cuando la epidemia mundial por el polio. Nadie sabia a quien le iba a dar y atacaba especialmente a los niños y a los mas jóvenes. Yo tenia 5 años cuando empezó y todo el mundo estaba asustado. Esta situación ni remotamente se parece al polio en su peligrosidad. Y con todo y lo difícil, se encontró la cura y se controlo el problema".
Los textos del también llamado poeta de la salsa se pueden encontrar en su blog: rubenblades.com.
yhc