En redes sociales, desde muy temprano, los usuarios marcaron las tendencias con sus recomendaciones para asistir al concierto de La Rosalía. Indumentarias y crónicas revelaban lo que ya estaba ocurriendo en la experiencia musical que “reventó” el Zócalo capitalino. A las 15:00 horas la zona más cercana al escenario estaba llena y poco a poco las calles aledañas al Centro Histórico replicaban la escena.
A pesar de que se sugirió no llevar sombrillas, el sol de la tarde obligó a la mayoría a cubrirse de las inclemencias del clima, que además amenazaba con castigar con lluvias.
Para las 18:00 horas las dos secciones que dividían la plancha del Zócalo ya estaban a 65 por ciento de su capacidad. Algunos se asomaban por los balcones, otros esperaban sentados o acostados en el suelo, y aunque el sol ya se ocultaba entre los edificios, la sensación sofocante de estar entre los espectadores obligó a las autoridades a sacar algunos que tiraron la toalla y a aventar bolsitas con agua a aquellos que necesitaran refrescarse.
Entre la muchedumbre, era evidente la presencia de turistas que, interesados por el montaje y congregación, se acercaban a preguntar sobre el evento gratuito.
“El concierto de Rosalía es para todo público”, decía una voz oficial; sin embargo, los jóvenes se sumaron al protagonismo de la española con su energía y alegría. Junto a ellos un alto número de cuerpos de seguridad, paramédicos y staff era parte de la cita.
“Buenas noches, México. ¿Están ready?”, preguntó ‘La Rosalía’ al iniciar su concierto. Y a las 20:20 horas, al ritmo de “Saoko”, “Bizcochito” y “La fama” empezó la fiesta ante 160 mil personas, de acuerdo con el reporte oficial.
“Esta ciudad es preciosa. Estoy felíz de cantaros’ aquí […] Gracias, México, me siento muy agradecía. Esta noche es para celebrar, pa’ gozar, así que ¡vamos!”.
Su impactante cuerpo dancístico, inolvidables visuales y una dramática iluminación acompañaron el surreal performance a los pies de la catedral. En las pantallas, una visión cinematográfica acercó al público a la ‘experiencia Rosalía' que sonaba a “La noche de anoche”, “Bulerías”, “Linda”, “Despechá”, “LLYLM” y “Blinding Lights”.
El público coreaba, bailaba y gritaba “¡Motomami!” y aplaudía cada acción, palabra y mirada de la cantautora. Uno de los momentos más especiales fue cuando al borde de las lágrimas cantó “La llorona”.
“México, quiero que sepas que estoy agradecida del cariño que me habéis dado desde el inicio de mi carrera y quiero que sepas qué (en mí) hay mucha inspiración de… Estudié canciones como ‘La llorona’”, compartió.
La noche siguió con “Hentai”, “CANDY”, “LA COMBI VERSACE”, “MOTOMAMI”, “Con altura”, “Beso”, “VAMPIROS”, “Héroe” y “Malamente”, entre otras, mientras el Zócalo y las calles aledañas lucían a reventar y la cantante compartía: “Me está entrando hambre de tanto bailar… A ver si al rato me echo unos tacos". _
Clave
Saldo blanco
- El reporte oficial indicó que la fiesta en el primer cuadro de la ciudad registró un saldo blanco, no obstante que la concentración del público inició el jueves por la noche.