José María Napoleón fue galardonado con la presea Gran Maestro, la distinción más grande que otorga la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM). Entre familiares, colegas y amigos, El poeta de la canción también disfrutó de un concierto honorífico con sus éxitos musicales.
“Mi agradecimiento para esta sociedad a la que pertenezco. Yo quería pertenecer a esto; tenía hambre y mucha era la necesidad que había en casa. Muchas cosas me hacían querer ser alguien en la vida”, declaró Napoleón, emocionado y entre lágrimas, desde el escenario del Centro Cultural Roberto Cantoral.
“Hoy en día veo hacia atrás, volteo y me siento satisfecho. Repetiría la historia porque no cambiaría nada. Aprendí que el único camino que existe en la vida es trabajar y luchar. Creer en lo que haces para llegar algún día a donde quieres llegar. Si volviera a nacer, haría lo mismo. Me siento muy honrado de estar aquí. Gracias”.
Por varios minutos el público que llenó el auditorio ovacionó al compositor, quien disfrutó al escuchar algunas de sus canciones — como “Lo que fue no será”, “Vive” y “Eres” — en las voces de Ernesto D’Alessio, Carlos Rivera y su hijo, José María.
Martín Urieta, presidente del consejo directivo de la SACM, dedicó unas palabras a Napoleón: “Mi querido Napo: pienso que se requiere una tremenda elocuencia para hablar de tu grandeza. Se necesitan palabras muy bellas para hablar de tu trayectoria enorme, trayectoria como compositor, como intérprete, como ser humano. Pero no se requiere y no importan mucho las palabras, sino el fondo y la sinceridad con que se digan las cosas, aún cuando se manifiesten en un idioma sencillo”. _
Claves
El galardón
“A esta presea le pusimos ese título porque la palabra maestro viene del latín magister, que significa "hacer bien las cosas”, dijo Urieta.
Los invitados
Alicia Villarreal, Siddhartha, Leonel García, Horacio Palencia y Ernesto D’Alessio pasaron por la alfombra en la velada.