Ante un lleno total, Alejandro Sanz refrendó su amor por los laguneros durante el concierto que ofreció la noche del Día de San Valentín en el Coliseo Centenario, como parte de su tour "Sanz En Vivo", con el que recorrerá varios países de América Latina.
Semanas antes de su presentación en esta ciudad, el cantante español logró ‘sold out’, por lo que sus más fieles admiradores decidieron llegar a tiempo al recinto para evitar aglomeraciones, con una magnífica actitud y dispuestos a pasar una velada llena de nostalgia, romanticismo, amor, desamor y bellos recuerdos al lado de su artista favorito.
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El astro español apareció en el escenario a las 20:39 horas, en medio de una nube de humo tras abrirse dos puertas gigantes, y con tremenda ovación por parte de sus seguidores, arrancó su presentación con el tema "No es lo mismo" y "Lo que fui es lo que soy".
Ataviado en un pantalón verde ajustado y una playera negra, luciendo su nuevo look con el que resalta su pelo decolorado y lentes oscuros, desde el primer momento Sanz irradió gran energía y jovialidad, la cual fue plasmando en cada una de sus interpretaciones.
“Deja que te bese", fue la siguiente melodía que entonó acompañado de su guitarra, mientras los asistentes iluminaban con sus celulares corazones que les entregaron fans en las afueras del recinto.
Acompañado de nueve músicos y dos coristas, el ídolo de la música pop, continuó con un medley que abarcó éxitos como "El alma al aire", "Regálame la silla donde te esperaba" y "Hoy llueve", momento que aprovecharon algunas fans para lanzarle celulares y obviamente no pudo faltar el simpático Simi.
"Buenas noches, cuánto hace que no nos vemos, estamos felices de estar aquí, básicamente es entregar y recibir energías, esto es lo que siempre soñamos, subir a un escenario y estar aquí con ustedes, gracias Dios mío por darme la oportunidad de estar aquí", expresó Alejandro, y los gritos no se hicieron esperar.
A través de tres pantallas gigantes colocadas sobre el escenario y dos a los laterales, los asistentes apreciaban imágenes de diversos paisajes, mientras tanto Alejandro continuó con "Desde cuándo", misma que fue entonada por sus admiradores de principio a fin.
“¿Todo bien? ¿Les falta algo?", preguntó el artista, "cualquier cosita me la piden", dicho esto los complació con "Looking for paradise", misma que cantó a dueto con una de las coristas, y acompañado de otra guitarra, una que fue decorada a mano por artesanos huicholes, posteriormente le tocó el turno a "Mi marciana".
El momento perfecto para enfatizar el toque romántico de la velada finalmente llegó, una vez que le tocó el turno a "Mares de miel", "La fuerza del corazón", "Siempre es de noche" y "Cuando nadie me ve".
El buen ambiente estaba a su máxima expresión, por lo que el cantautor los complació con "Amiga mía", sus fans se desataron y le lanzaron playeras, flores y una tejana negra que no dudó en colocarla en su cabeza.
"En este día del Amor y la Amistad no hay que festejarlo sólo este día, hay que morir en el amor, esto va para todos los enamorados, feliz San Valentín", manifestó el cantante, para luego deleitarlos con "Contigo" de Joaquín Sabina.
Se aproximaba el final, pero ni Sanz ni sus admiradores querían irse, y mientras esto ocurría, no podía faltar el éxito "Corazón partió", con el que los puso de pie y sin ganas ya de sentarse.
Siguieron ambientándose con "Hoy que no estás", y al concluirla, ya parecía el final una vez que se retiró del escenario, pero regresó para despedirse con broche de oro en punto de las 22:18 de manera acústica con los éxitos que lograron consagrarlo durante sus 35 años de trayectoria artística, tales como "Viviendo de prisa", "Mi soledad y yo", "Y ¿si fuera ella?", los cuales fueron entonados por sus fieles laguneros, quienes ya anhelaban este reencuentro.
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