El Auditorio Telmex transformó su territorio en la mítica y ancestral Aztlán con motivo de la llegada de Zoé a la ciudad. La banda ofreció un concierto en honor a su más reciente trabajo discográfico titulado como la sagrada ciudad azteca.
Luego de casi tres años de ausencia en escenarios tapatíos Zoé regresó triunfal en el marco del Zoé Tour 2018, el cual despegó hacia el sistema solar en punto de las 21:15 horas.
“Venus” fue el tema elegido que abrió y aterrizó el micrófono y los instrumentos de la banda liderada por León Larregui, quien apareció luciendo un poncho multicolor.
“Muchísimas gracias y muy buenas noches, gracias por estar aquí... bueno, ¡vamos a darle!” dijo Larregui saludando a los más de 8 mil tapatíos que se habían dado cita en el recinto.
La agrupación cuernavacense hizo retumbar la batería y los sintetizadores para corresponder la histeria del público. Pronto los sonidos se mezclaron y compusieron en vivo la melodía de “Azul”, tema que fue coreado y aplaudido por todas las almas presentes.
Fue así como el escenario en forma de pirámide invertida se reincorporó en colores cálidos y cobijó entre videoclips a Sergio Acosta, Jesús Báez, Ángel Mosqueda, Rodrigo Guardiola y León Larregui para llevar a cabo las “10:00 AM” y “Fin de semana”.
El vocalista apoyó un sintetizador, una botella de agua y un megáfono en una periquera al costado de su micrófono para interpretar “Nada”, tema que fue todo para los tapatíos, quienes hasta el momento permanecían de pie. El baile se apoderó de cada cuerpo en la sala e hicieron que vibrara el piso al ritmo de “Poli”.
Los ánimos no decayeron y mientras tanto el grupo invocaba a la nostalgia; “Vamos atrás en el tiempo, a recordar una canción” dijo Larregui antes de entonar “Paula”. La balada continuó iluminada con miles de celulares al aire con un “Arrullo de estrellas” y después se transportó a “Andromeda”.
El recorrido de éxitos que la banda tenía preparado para esa noche hizo escala en cada rincón del universo y con eso llevó a cada tapatío en un viaje por algunas de las canciones más destacadas de la sexta producción de la banda, “Aztlán”, la cual destaca por psicodélicos ritmos y letras introspectivas.
“¿Están listos o no?” preguntó León antes de pasearse por la “Vía láctea” y para después “Renacer” en el terreno del “Hielo”.
La fría melodía fue la antesala para lo que fue una apasionante y enérgica interpretación de “Labios Rotos”, tema que rompió en llanto para los fanáticos más entregados. El grupo aprovechó la potencia de este tema para anunciar su despedida “Lo bueno que es una buena rola, no se pueden quejar tanto”.
Una gran ovación seguida de un firmamento fabricado por linternas se extendió por el inmueble y obligó al quinteto a regresar al escenario. “Bueno, una más” dijo León Larregui previo que cantará “Luna”, “No me destruyas” y “Soñé”.
Momentos antes de retirarse, la agrupación dejó plasmado todo su amor con “Love” y dijo hasta pronto luego de casi dos horas de un cósmico y emocionante concierto.
MC