Competitiva, audaz y con ganas de seguir aprendiendo, así se define Paty Navidad, quien resultó la ganadora en la tercera temporada de Top Chef Vip por Telemundo Internacional, donde demostró sus aptitudes para cocinar.
“Este fue uno de los proyectos más difíciles, estresantes, demandantes que he hecho casi con 40 años de carrera, fue muy exigente en todos los aspectos, no solo en la cocina que era la protagonista, sino en todo lo demás. Fue un gran esfuerzo que requirió de concentración, dedicación, disciplina y desvelos para practicar y aprender”, confesó en entrevista con MILENIO.
Su estancia por dos meses en Colombia, país donde se llevaron a cabo las grabaciones del reality, le implicó un encierro casi total porque desde las 6:00 hasta las 22:00 horas estaba dedicada al proyecto, estudiando y practicando diferentes recetas con apoyo de diferentes chefs.
Todos los sentidos se vieron involucrados a su máxima expresión y a pesar de ser cantante, tuvo que ponerle más atención a lo que oía, ya que cada indicación de los chef que fungieron como jurados era clave para avanzar.
Cuando Navidad recibió la invitación para participar en la competencia gastronómica no quería aceptar porque implicaba dejar su amado México, sin tener el tiempo definido, porque todo dependía de cómo se dieran las cosas y porque tenía que irse sola.
“Después de vivir varios eventos un poco traumáticos, era difícil irme sola a convivir con personas que no tenía idea de quiénes eran, enfrentarme de nuevo a la cocina, aunque amo la cocina no soy cocinera, sabía que Top Chef tenía un grado de exigencia más elevado y siempre pierdo -risas- bueno, gano perdiendo”, comentó.
Para la actriz este concurso la llevó a enfrentar no solo el hecho de cocinar, sino saber resolver retos, como tener en contra el reloj, porque los tiempos eran muy estrictos.
“Me considero una alumna disciplinada, aprendí mucho de los chef, estoy feliz de haberlo aceptado, enfrenté mis miedos, los vencí y gané, siempre hubo respeto, armonía y un gran profesionalismo. Ha sido de los proyectos más enriquecedores”, dijo.
Haciendo un recuento final Paty considera que Top Chef Vip le dio no solo el premio de 200,000 dólares, sino evolución y madurez como cocinera y como mujer, porque en la cocina se tuvo que conectar desde el alma, recordar a su familia, vivencias y emociones para plasmarlo en los platillos.
“Había que conquistar el paladar de los profesionales, conectar y transmitir con el público, estoy satisfecha, orgullosa y agradecida con todos mis compañeros y con la gente que me apoyó y me dio su cariño incondicional. El dinero a todos nos cae bien pero el público es lo más valioso, esa reconexión que de nuevo se dio, al apapacharon, recibirme en sus hogares con amor y aceptarme tal y como soy, lo valoro mucho”. agregó.
El miedo principal que tenía al entrar al programa era hacer el ridículo sin ser cocinera.
“Después de ser tan bombardeada y juzgada, no quería que otra vez sucediera. Descubrí que no debe importarnos nada y atrevernos, no tener miedo a intentarlo de nuevo, porque mientras tengamos vida, hay oportunidades”.
Claves
Durante el programa cocinó más de 120 recetas diferentes que se mostraron a lo largo de 60 programas, cada uno con una duración de 3 horas de transmisión.
El sazón dice que lo heredó de su abuela y de su mamá, pero también por parte de su familia paterna, porque todos cocinan muy bien.
AJR