Buscar una sonrisa de una persona cuando las condiciones en su alrededor lucen desoladoras no suena nada fácil.
Pero el ímpetu y amor por el prójimo, ha llevado a Fabiola Vargas a buscar ser parte de esa chispa que encienda la risa a quienes viven momentos difíciles en un hospital.
Fabiola forma parte de los Médicos de la Risa de La Laguna.
“La risa te ayuda a liberar endorfinas como hormonas de felicidad, te ayuda en el sistema inmunológico, las carcajadas limpian los pulmones, además de que se transmite toda una energía positiva cuando alguien ríe”, comparte.
Cuando era niña su padre la invitó a estudiar teatro, pues notaba en ella una personalidad seria, lo cual resultó la semilla que al paso del tiempo ha dejado frutos al capacitarse en el ramo del clown y con las habilidades adquiridas brindar una mejor atención en algo que ya es su vida, con una labor noble de sobra.
La joven gomezpalatina emana su creatividad como estímulo para crear diversión dentro de un ambiente hostil, por la naturaleza de cualquier hospital, por lo cual llegan con toda su energía lista para ser transmitida con sus ocurrencias y provocar esa reacción que raramente se produce en la soledad.
Para la joven de 34 años la nariz roja de payaso representa el corazón y expresa que es la máscara más pequeña con la que se puede sacar el niño interior de cada persona.
“La nariz representa nuestro corazón y es considerada la máscara más pequeña, aquella máscara que nos ha permitido poder entrar con los pequeños a los hospitales a llevarles un poco de diversión”.
Su primera visita como médico de la risa fue en el desaparecido Centro de Reinserción Social (Cereso) de Gómez Palacio, con un show especial para los hijos de los reos, una experiencia que la marcaría de por vida, al igual que la segunda vez en el Hospital infantil.
“Fue un gran reto el darme cuenta que hay una vida más que la que tú vives y esas experiencias me abrieron la visión de la vida muy amplia y me hicieron ver que a veces nos preocupamos por cosas muy sencillas”, comparte ‘Lola’, pseudónimo de Fabiola.
Junto con los demás doctores de la risa cada domingo llevan ocurrencias improvisadas, que generan risas y transmiten amor y toda la felicidad posible a la Clínica Unidad Médica de alta especialidad 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Torreón.
Mientras que en La Laguna de Durango acuden cada domingo al Hospital General de Gómez Palacio, así como visitas a asociaciones y casas hogar.
“Es gratificante sacar a los enfermos de ese ambiente incertidumbre y ubicarlos en otra perspectiva. Es lindo explicarle al niño que le están poniendo súper poderes para cambiar un poco su entorno”.
Las ocurrencias y toda esa noble labor están forjados no sólo con la preparación teatral de algunos Doctores de la Risa, sino de su constante capacitación en áreas como Tanatología, Manejo de Emociones y seguridad e higiene, por lo delicado que representan algunos objetos en hospitales.
“Ver que podemos mejorar las condiciones de ánimo de una persona en condiciones desfavorables me alegra mucho el corazón, ya que darse el tiempo de estar en los momentos difíciles es lo que más se requiere”.
Desde hace dos años, inició con el proyecto de ofrecer de manera formal servicios que ha formado desde que inició con las actividades de doctores de la Risa de la Laguna con talleres y sesiones de ‘Risoterapia’, además de tener ya tres años de fomentar la lectura con cuenta cuentos clown.
Para preparar lo que consideran como una medicina cargada de amor, comprensión, felicidad y diversión, se reúnen los 25 integrantes de Médicos de la Risa en el Bosque Venustiano Carranza para entrar en el personaje todos juntos, sacar esa chispa en conjunto y al finalizar el día comparten sus experiencias con una retroalimentación.
¿Cuales son los proyectos que vienen para los Médicos de la Risa de la Laguna?
Buscamos conformarnos como asociación civil y estamos a punto de hacerlo luego de 12 años de trabajo, además queremos participar con nuestras terapias a más hospitales pues actualmente sólo colaboramos con dos.