A menos de una semana del estreno de los primeros dos episodios de la sexta temporada de Better Call Saul, el spin off creado por Peter Gould y Vince Gilligan del universo de Breaking Bad, los millones de fans de la serie volvieron a llevar la historia de Saul Goodman (Bob Odenkirk) al top de programas más reproducidos en Netflix con más de 15.1 millones de horas visualizadas entre el 4 y 10 de abril, según datos de Netflix.
La serie de AMC regresa con su sexta y última temporada después de dos años de pausa, hecho complicado para la casa productora, que no ha hecho más que incrementar la expectativa en los fans, quienes si hacemos caso de comentarios y adelantos del elenco, no estarán decepcionados con la forma en que esta historia llega a su fin.
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El camino del spin off no es fácil. Menos cuando deriva de la que es considerada como una de las mejores series de televisión de la historia (Breaking Bad). Sin embargo, desde su primera emisión, en 2015, Better Call Saul se distinguió como una de las mejores ofertas, y aprendió a destacar por mérito propio. Un increíble elenco y la dupla de guionistas Gould-Gilligan la convirtieron en uno de los dramas favoritos de la audiencia por más de siete años.
El desenlace
A esta ecuación llegó el actor mexicano Tony Dalton en la cuarta temporada, convirtiéndose rápidamente en uno de los villanos favoritos de los fans, Lalo Salamanca, quien se convirtió en un personaje pivotal para Better Call Saul.
“Estoy muy emocionado de que la gente vea el desenlace de estos diez años, para los que vieron desde Breaking Bad. Todo lo que el público está esperando ver, se va a cumplir con mucho más. Sí se cierran todos los círculos, no queda ninguna piedra sin levantar”, aseguró Tony Dalton en entrevista con MILENIO.
La quinta temporada colocó a los principales personajes en los puntos estratégicos de lo que está por venir, aquí Lalo Salamanca se convierte en la chispa que desencadenará todos los movimientos hasta llegar al punto de partida de Breaking Bad.
Peter Gould, guionista y showrunner, siempre ha destacado la importancia y su búsqueda de una narrativa cinematográfica en Better Call Saul.
La serie cuenta la historia de Jimmy McGill y su viaje de transformación hacía Saul Goodman, figura central en Breaking Bad: la metamorfósis de un hombre invadido por el resentimiento, un paralelo a otro personaje de este universo, Walter White (Bryan Cranston).
La fuerza de ambas producciones está en su elenco. Encabezados por Bob Odenkirk, el reparto conformado Rhea Seehorn, Michael McKean, Patrick Fabian, Michael Mando y Tony Dalton se unió a otros nombres familiares del universo (Giancarlo Esposito, Jonathan Banks y Mark Margolis) para delimitar las piezas que le dio a Better Call Saul su lugar propio en la televisión internacional, representado en sus 39 nominaciones a los premios Emmy.
El Lalo Salamanca de Tony Dalton quedará perpetuado en la historia como uno de los personajes antagónicos más memorables.
“Me dio mucho gusto trabajar con ellos, todos fueron muy amables, muy profesionales. Se hace una comunidad, no solo con los actores, sino con toda la gente que trabaja ahí, es una especie de familia. A mí me abrieron las puertas y me recibieron con los brazos abiertos, Jonathan Banks es mi brother”, agregó Dalton.
Con su reciente participación en la serie de Marvel Hawkeye, Tony Dalton asegura que cada parte de su camino le ha abierto las puertas a otros proyectos: “En el caso de Marvel, fue porque son fans de Better Call Saul, dijeron: háblale a él”.
A pocas horas de iniciar la última parte de su trabajo como Lalo Salamanca, el actor, también conocido por su trabajo en proyectos como Matando Cabos y Sr. Ávila, agradeció formar parte de la serie de AMC.
“Todos los momentos han sido maravillosos. No me gustaría escoger uno porque se me haría injusto. Yo disfruto mucho mi trabajo, estoy muy agradecido de estar trabajando, hay mucha gente que se quedó sin trabajo por esta pandemia y sin familiares”, declaró.
El punto de partida
El panorama siempre fue complejo para Peter Gould y Vince Gillligan, las principales voces detrás de ambas series, pero contar la historia de cómo se creó el abogado Saul Goodman (Bob Odenkirk), exponer sus orígenes, las interacciones que motivaron sus acciones y lo que sucedió con él después de los acontecimientos de la última temporada de Breaking Bad fue una propuesta muy atractiva para ellos y para la audiencia.
A partir del próximo lunes 18 de abril, cada personaje tendrá su momento para jugar sus últimos movimientos y llegar al lugar de inicio. Este es un elemento narrativo que ha seducido a los fans de este universo desde los inicios de la serie: conocer el desenlace de personajes como Kim Wexler (Rhea Seehorn), Nacho Varga (Michael Mando) y el mismo Lalo Salamanca (Tony Dalton), que no aparecen en Breaking Bad.
La expectativa sobre la culminación de la sexta temporada incrementó cuando durante la alfombra roja de la premier, Gilligan y Gould insinuaron el regreso de Walter White y Jesse Pinkman para un crossover único: “Esos dos universos se juntan de una forma que los fans no han visto antes, eso es seguro”, comentó Peter Gould, a lo que Vince Gilligan añadió: “Sería una verdadera lástima que el programa terminara sin que ellos aparecieran, ¿no?”.
A partir del próximo lunes el público podrá experimentar el final del camino para Jimmy McGill y la gota final que lo convirtió en Saul Goodman.
Un final por partes
Ya se había anunciado que la última temporada de Better Call Saul estaría dividida en dos partes. Es por eso que se transmitirán los dos primeros episodios en su día de estreno, el lunes 18 de abril, y a partir de ese día, habrá uno nuevo durante siete lunes, por AMC, AMC+ y Netflix. La serie tendrá una pausa en verano y regresará el 11 de julio para presentar los últimos seis episodios.
hc