Con la sólida y exitosa experiencia de haber fundado en 1997 la revista Milenio Semanal, que de inmediato ocupó un lugar de privilegio entre las publicaciones de su tipo; y en el año 2000, Milenio Diario (que también se posicionó rápidamente como uno de los tres periódicos nacionales más influyentes), en el verano de 2007 Grupo Milenio comenzó a planear el proyecto editorial de Milenio Televisión, su más ambiciosa y arriesgada apuesta mediática hasta ese momento.
La idea era producir una señal noticiosa, de información y análisis, 24 horas al día, los 365 días del año. Aun los programas de opinión y humor debían pasar por el riguroso tamiz del tratamiento periodístico.
Milenio Televisión llegaba en uno de los momentos más críticos y apasionantes, más severos pero también más prometedores de la historia reciente de México: acababa de pasar la elección presidencial más reñida y crispada; iniciaba la estrategia de combate al crimen organizado, que según los expertos tiene sumido al país en una crisis severa de violencia, y el mundo se acercaba al abismo de una gran crisis económica.
Con este panorama, no faltaron quienes tacharon de absurdo el proyecto. Quienes advertían que no eran buenos tiempos para invertir, y menos en una señal televisiva exclusiva de noticias. Que era imposible, que no éramos CNN y se traía a la memoria la experiencia de ECO.
Pese a todo, y sumando el trabajo y experiencia de más de 100 reporteros desplegados en la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, un grupo de jóvenes y veteranos periodistas de televisión, encabezados por Ciro Gómez Leyva, entonces directivo del diario, dimos forma finalmente al proyecto, y la señal de Milenio Televisión se encendió la noche del 20 de octubre de 2008.
Milenio Televisión venía acompañado de un novedoso formato: noticiarios de 15 minutos de duración y una programación lo suficientemente flexible, como para ser interrumpida o alargada, dependiendo de la coyuntura noticiosa (los famosos breaking news).
Era el Milenio de siempre, pero ahora en una pantalla. El Milenio de toda la vida, con una nueva forma, imaginación y repercusión: mucho oficio, el rápido desarrollo de las tecnologías para transmitir en vivo, y un poco de suerte (la cuarentena por la presunta epidemia de influenza AH1N1, por ejemplo) colocaron muy rápido a nuestra señal como una referencia obligada de la información nacional, actualizada prácticamente al momento, como reza uno de nuestros lemas: “la noticia cambia minuto a minuto”.
El éxito de Milenio Televisión podría medirse también en los varios proyectos parecidos que otras empresas de medios de comunicación impulsaron poco después para competir con nuestra plataforma.
Cumplimos 10 años no solo con la satisfacción de lo que se ha hecho, sino además con la preocupación de renovarnos. En esta década el mundo también se movió…¡a pasos agigantados! La irrupción de las redes sociales reconfiguró la forma de consumir noticias.
Recordemos que cuando Milenio Televisión nació, Facebook apenas estaba disponible en español; Twitter, creado en 2006, llegaría al castellano hasta 2009, es más joven que nosotros. Instagram sería lanzada en 2010; Youtube, la más veterana de las redes sociales, fue activada en febrero de 2005.
La competencia que representan estas redes sociales en la forma de difundir noticias (mayor velocidad, una audiencia más fragmentada) y en moldear los gustos de sus usuarios, nos obligan a preguntarnos hacia dónde queremos, debemos y podemos ir. En el camino a nuestros segundos 10.