Para José María Napoleón no hay quinto malo, así lo demostró durante el concierto que ofreció para despedirse definitivamente de su público de Monterrey.
Y es que esta se trata de la quinta vez que 'El Poeta de la Canción' regresa a la Sultana del Norte con su gira 'Hasta Siempre', con la que busca hacer su retiro de los escenarios, pero que debido al cariño y a la entrega que le demuestran sus más grandes seguidores, se vuelve más complicado decir adiós por completo.
Fue alrededor de las 19:30 horas que dio inicio la noche de nostalgia y recuerdos, que de inmediato llegó a los asistentes del Auditorio Citibanamex.
Acompañado de sus músicos, Napoleón se presentó cara a cara por última vez de su público y lo hizo al ritmo de temas como 'De vez en vez', 'Corazón Bandido' y 'Quisiera'.
"Monterrey, gracias a todos los presentes. Es un honor para mi cantar para todos ustedes estas canciones que a través de los años escribí de una por una", mencionó el originario de Aguascalientes.
Una de las características que define al compositor es su innegable caballerosidad, por lo que también aprovechó para dedicar, como ya es acostumbrado, un mensaje para todo su público femenino.
"Es importante siempre la mujer. No hay nada más hermoso en este mundo, no hay nada más bello e incomparable. Qué maravilla. Ellas son, no la salsa de la vida, son el todo de la vida", compartió.
Aunque miles fueron los que estuvieron presentes en este recinto, la velada contó con una vibra íntima en donde el cantante pudo dedicar sus temas y recitar otros tantos para el deleite de todos, en momentos acompañado únicamente por la guitarra acústica.
Tras dedicar un popurrí de temas que le escribió a José José que convirtió en todo un éxito como 'Lo que no fue no será' y 'Mientras llueve', interpretó uno de sus más recientes canciones 'Cuando se pierde un amigo'.
Napoleón nuevamente se ganó los aplausos al reversionar algunos de sus temas al mas estilo de la música mexicana junto a el Mariachi Imperial Azteca que llegó para acompañarlo en el escenario.
Y es que no solo el mariachi sorprendió con su aparición sino también su hijo José María, quien compartió sus propios temas ante el público de su padre.
Las porras no dejaron de resonar al interior del recinto, y estas aumentaron cuando Napoleón vistió una jersey del equipo de Tigres mientras que su hijo hizo lo propio con una de Rayados al dedicar el tema 'Hombre'.
"Siento una enorme satisfacción de todo lo que ha ocurrido a través de los años. Me siento muy agradecido, muy amigo de ustedes. Gracias mi querido Monterrey", fue uno de los últimos mensajes que dedicó antes de interpretar por última vez sus éxitos 'Pajarillo', 'Eres' y 'Vive' con los que se despidió por todo lo alto tras dos horas de concierto.