En un operativo interinstitucional en el rancho denominado Los Herrera en el municipio de Pantelhó, Chiapas, las fuerzas de seguridad aseguraron armas de fuego, cartuchos y cargadores de diferentes calibres, además de granadas.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR) el cateo fue ejecutado por orden de un Juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal luego de que militares reportaron ser agredidos por personas armadas en el predio que se localiza cerca de la comunidad el Duraznal.
Sin embargo, el pasado 7 de diciembre elementos del Ejército Mexicano y Guardia Nacional también fueron agredidos por integrantes del grupo criminal Los Herrera, cuando se encontraban distribuyendo en la cabecera municipal despensa a los pobladores que se quedaron atrapados por los enfrentamientos.
Los elementos de seguridad aseguraron en el lugar 19 armas de fuego largas, un aditamento lanzagranadas, un tubo cañón, 11 granadas de humo (granadas que por cuestiones de seguridad fueron destruidas en las inmediaciones de dicho sitio), 77 cargadores y 22 mil 10 cartuchos de diferentes calibres, 23 fornituras, 19 chalecos tácticos y el inmueble.
En la movilización participaron elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), a través de su Fiscalía Federal en el Estado de Chiapas, la Policía Federal Ministerial (PFM), la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Lo asegurado fue puesto a disposición del Ministerio Público Federal de la FGR en Chiapas, quien continúa con la integración de la carpeta de investigación en contra de quien o quienes resulten responsables en la comisión de portación de arma de fuego sin licencia, acopio de armas de fuego y posesión de cartuchos y cargadores de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
La disputa del poder político y social de Pantelhó inició en 2021 cuando surgió el grupo de autodefensa denominado El Machete y se agudizó desde el pasado 4 de diciembre cuando se enfrentaron contra el grupo criminal Los Herrera vinculado al crimen organizado, por lo que durante casi una semana los pobladores quedaron en medio de las balas.
A pesar del ingreso de las fuerzas de seguridad a la zona, la violencia continuó en las comunidades como San José Tercero, donde una decena de casas fueron incendiadas y los pobladores tuvieron que desplazarse hacia otros municipios, mismos donde permanecen hasta el momento.