Un ataque armado dejó como saldo un migrante muerto y otro herido en Tapachula, Chiapas.
El ataque ocurrió en una concurrida zona de Tapachula, específicamente en la intersección de la 9a Sur y la 18 Oriente, un área conocida por su alta densidad poblacional.
De acuerdo con testigos, una camioneta alcanzó a un joven de aproximadamente 25 años de edad mientras caminaba por la calle.
Sin mediar palabra, uno de los ocupantes del vehículo disparó repetidamente contra el joven, impactándolo fatalmente en la cabeza. La víctima, de origen hondureño y de oficio hojalatero, había residido en Tapachula por varios meses antes de su muerte.
Durante el ataque, un segundo joven, que pasaba por el lugar, fue alcanzado por una bala perdida. A pesar de las heridas, fue atendido rápidamente por elementos de la Cruz Roja, quienes lo trasladaron a un hospital cercano donde recibe atención médica.
La Fiscalía General del Estado de Chiapas ha iniciado una carpeta de investigación para esclarecer los hechos y determinar el móvil del crimen. Aunque aún no se ha confirmado si el ataque estuvo relacionado con actividades delictivas o si fue un acto aislado de violencia.
Las autoridades locales intensificaron las labores de vigilancia en la ciudad, especialmente en zonas con alta concentración de migrantes.
Migración en Tapachula
Tapachula, ubicada en la frontera sur de México, es un punto de entrada clave para miles de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
La ciudad es testigo de un incremento significativo en la población migrante, compuesta principalmente por personas provenientes de Honduras, El Salvador, Guatemala y, en menor medida, de países del Caribe y África.
La migración en México, por otra parte, es un fenómeno multifacético que afecta tanto a quienes transitan por el país como a los propios mexicanos que buscan migrar hacia Estados Unidos.
Según datos de la Secretaría de Gobernación (Segob), el año 2018 registró el rescate de 138 mil 612 personas en estaciones migratorias del Instituto Nacional de Migración (INM).
Además, la deportación de extranjeros desde México alcanzó las 112 mil 317 personas en 2018, reflejando la política migratoria restrictiva que se implementó en los últimos años.
Esta situación se vio agravada por las condiciones de inseguridad que prevalecen en varias regiones del país, incluyendo Chiapas, donde la violencia y el crimen organizado representan amenazas constantes para la población migrante.
Derechos humanos y seguridad en la migración
De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), es imperativo que las políticas migratorias en México y en la región centroamericana sean diseñadas y ejecutadas con un enfoque de derechos humanos, garantizando que las personas migrantes puedan transitar de manera segura y digna.
El concepto de seguridad humana es crucial en este contexto.
Este enfoque busca proteger las libertades fundamentales y asegurar que las personas, independientemente de su estatus migratorio, puedan vivir libres de amenazas y con acceso a sus derechos básicos.
MO