Personal del departamento de Bomberos y Protección Civil de Lerdo acuden a sofocar de 15 a 20 incendios de maleza, los que en su mayoría son provocados por vándalos o personas que queman viejos neumáticos para la extracción del alambre.
En ésta época decembrina el número se puede incrementar ya que suelen llevar el cable o neumáticos y le prenden a la maleza, donde por no hacer un tipo de corta fuego, este se extiende y se sale de control, por lo que es necesario la intervención de los rescatistas, por acciones irresponsables.
Otros por la facilidad de tratar de limpiar el predio, le prenden fuego y muy tarde se dan cuenta de las graves consecuencias que provocan, como el riesgo de mayor incendio, que en ocasiones se puede extender a viviendas construidas de cartón y madera, como ha ocurrido en algunos casos.
Isabel Macías Sifuentes, titular de la dependencia, señaló que para evitar este tipo de siniestros que pueden ser de mucho peligro, contaminación para el medio ambiente, además de que se les puede aplicar multa a los infractores es: mantener los predios limpios, no encender fuego en lugares no habilitados, no utilizar pirotecnia en zonas donde hay material combustible vegetal, no tirar colillas de cigarros o cerillo en encendidos al suelo, no dejar botellas de vidrio o plástico para evitar el efecto lupa.
Revisar de manera constante la fogata o fogón que se haya encendido, atender constantemente el fogón que se haya encendido.
Macías Sifuentes agrego que para el personal es de suma importancia optimizar recursos ya que al atender este tipo de llamados consume tiempo, agua, desgaste físico y combustible, pero por necesidad y para evitar peligro es necesario acudir al llamado de auxilio.
Los incendios de maleza rápidamente se pueden extender y llegar a zonas protegidas lo que puede ocasionar graves problemas a los ecosistemas y a quienes habitan en las cercanías.
Cabe hacer mención que el pasado 14 de noviembre en la colonia Francisco Villa Sur, un grupo de menores prendió fuego a la maleza del predio donde se encontraban a resguardo 4 tubos de polietileno de alta densidad, los que en cuestión de minutos fueron consumidos y dejando un daño material por el orden de medio millón de pesos.
EGO