Las carreteras de México se han convertido en el triángulo de las Bermudas, porque cientos de personas han desaparecido sin dejar rastro.
La carretera que reporta mayor incidencia es la que conecta los estados de Nuevo León y Tamaulipas, una zona bajo control de distintos grupos criminales que se disputan la zona para el tránsito de enervantes.
Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (FUNDENL) documentó entre 2021 y 2022, al menos 70 personas desaparecidas en la carretera 85D.
La mayoría de las víctimas son choferes de transporte de carga y conductores de vehículos de empresas pequeñas y medianas. En medio de esta cifra, los familiares de las personas ausentes se preguntan por qué el crimen organizado se los llevó, qué interés hay detrás.
Además de la carretera que conecta a Monterrey con Tamaulipas, otro punto con alta incidencia de desapariciones se ubica en las carreteras que atraviesan el estado de Coahuila de Zaragoza.
El punto rojo se ubica en el entronque de Torreón y Monclova, donde de 2011 a la fecha se tuvo reporte de al menos un centenar de personas desaparecidas que fueron vistas por última vez en ese lugar, y el problema continúa.
Algunos casos fueron denunciados y otros permanecen en el anonimato.
En el occidente y el centro del país, los casos de desaparición de personas en carreteras no es un tema menor.
El 26 de septiembre de 2019, Miguel Ángel Olvera Balderas, desapareció cuando viajaba de Guanajuato-Zacatecas.
Entrevistada por MILENIO, su hermana Angélica Olvera Balderas narró que Miguel Ángel salió de Apaseo el Alto con varios compañeros de trabajo y perdió comunicación con su familia a la altura de San Juan de los Lagos.
Le informaron que su hermano y las otras personas que viajaban con él habían sido asesinados en Jalisco, que sus restos estaban en el Servicio Médico Forense.
"Le hablaron a mi mamá y le dijeron que tenía que reconocer el cadáver que porque los habían asesinado, nos manejaron que a siete personas las habían matado, nos dijeron es Miguel, Dolores, Juan Pablo, y otras personas de Querétaro y de no sé dónde, pero al llegar no estaban los cuerpos".
A partir de ese momento, la familia de Miguel Ángel ha peregrinado por casi todos los servicios médicos forenses de Jalisco, Zacatecas, Guanajuato y Aguascalientes buscando sus restos.
"Lo único que sabemos es que mi hermano desapareció en la carretera, cerca de Jalisco, y que supuestamente se lo habían llevado los del Cártel Jalisco Nueva Generación y que lo tenían trabajando en un laboratorio" comentó la mujer.
En Guanajuato, la guerra entre los grupos criminales Cártel Jalisco y el Cartel de Santa Rosa, ha provocado que en al menos 10 puntos carreteros se tengan múltiples reportes de desapariciones de personas.
Otra carretera del terror en el occidente del país es la que conecta Jalisco con Zacatecas. De diciembre a enero se tuvo reporte de 17 personas desaparecidas, que aparentemente fueron secuestradas por integrantes del crimen organizado que se disputan la zona, confirmó el Colectivo Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos en Jalisco (FUNDEJ).
Entre las víctimas están Daniela y Viridiana Márquez, la prima de ambas de nombre Irma Paola Vargas Montoya y el novio de Daniela José Melesio Gutiérrez Farías, cuyos cuerpos fueron encontrados sepultados el pasado mes de enero en una fosa clandestina, tras desaparecer el 25 de diciembre en la carretera que conecta Jerez, Zacatecas, con el municipio de Huejúcar, Jalisco.
FUNDEJ advirtió que en el estado de Jalisco tiene al menos 17 puntos con alta incidencia de personas desaparecidas en carreteras
En la autopista Mazatlán-Culiacán, se tuvo conocimiento de al menos una treintena de personas cuyo paradero se desconoce mientras transitaban por dicho lugar, denunció el colectivo Rastreando Tus Huellas de Sinaloa; Esta incidencia se reportó entre 2022 y 2023.
Otra carretera de la muerte es la México Veracruz, en donde han desaparecido personas para después ser encontradas asesinadas en fosas clandestinas.
En 2022, cuatro jóvenes desaparecieron cuando circulaban por la carretera de Tuzamapan, en Veracruz, sus cuerpos fueron encontrados días después en otro punto carretero a unos kilómetros de distancia del sitio donde fueron vistos por última vez.
De acuerdo con integrantes consultados del Colectivo Solecito de Veracruz, la mayoría de las víctimas son conductores de camiones de carga.
A decir de familias que tienen una persona desaparecida cuya última ubicación fue una carretera, aseguran que es muy complejo poderlas encontrar, porque la mayoría de las víctimas son raptadas por la delincuencia organizada para trabajar como sicarios a la fuerza, o al menos, esa es la hipótesis que ellos tienen.
ledz