Hasta finales del 2023 la violencia generada por el crimen organizado en la zona de la Sierra Fronteriza y Selva Lacandona de Chiapas provocó que algunos centros turísticos y zonas arqueológicas dejarán de recibir a los cientos de visitantes que acudían de forma diaria, debido a la falta de garantías de seguridad.
Sin embargo, empujados por la necesidad de obtener un ingreso económico, las familias que dependen del turismo decidieron reabrir algunos sitios como Las Nubes, Yaxchilán, Escudo Jaguar y Nueva Alianza, con la esperanza de que a la brevedad puedan recuperarse y con ello, continuar conservando y preservando los atractivos naturales enclavados en la Selva Lacandona del estado sureño de México.
La esperanza
A pocos días del inicio de la primavera y con un clima soleado, se observa al señor Virginio Jiménez Ortiz, presidente de la Sección de Restaurante y Cabañas, ir de un lado a otro dentro de las instalaciones del Centro Turístico Escudo Jaguar que se localiza en la comunidad de Frontera Corozal, pues los prestadores de servicios se alistan para recibir a los turistas que prevén arriben en próximos días.
Asegura que en temporada alta llegan a tener una oferta laboral de 22 empleos directos por el alto flujo de paseantes, sin embargo, en esta ocasión por ser el arranque de un nuevo amanecer, solo están siete de los 33 socios que conforman la cooperativa, todos con tareas distintas pero con una misma misión, poner en marcha el sitio para generar ingresos.
“Estamos haciendo todo nuestro esfuerzo para poder levantar este negocio, nos hemos detenido durante estos cinco meses por el problema que tuvimos, pero ahorita estamos haciendo la limpieza (…) Vamos a empezar con lo poco que podemos, pero ahí vamos, yo creo que es buena hora, vamos a tener la esperanza de que vamos a levantar de nuevo, así como nos pasó en 2020 con el covid”, afirma.
Virginio quien viste con una playera verde, pantalón negro y botas de plástico, recuerda que los diferentes sucesos que han vivido a lo largo de 27 años, los ha invitado a la reflexión y aprendizaje, pero sobre todo a unirse en hermandad con sus compañeros, para continuar trabajando para sus familias y conservar una de las bellezas de la entidad, la cual se distingue por sus espacios verdes y su cercanía con el río Usumacinta, considerado uno de los más caudalosos.
“Nos queda como una historia, como una reflexión de que nosotros debemos apoyarnos unos a otros, porque lo que ha pasado es muy difícil para nosotros y para el pueblo, porque el pueblo también teme por la inseguridad, por lo que hay, por lo que ha visto la gente de manera presencial”, relata.
Este sitio turístico fue creado en 1996 mediante un proyecto a crédito del Programa Nacional de Apoyo para las Empresas de Solidaridad (FONAES) y hoy son ellos mismos, quienes invierten para rescatar su fuente de trabajo.
Manos a la obra
Sismondi Esparza Flores, presidente de la Asociación de Empresas de Turismo de Reuniones y Tour Operadores Turísticos, celebra la recién reapertura de los sitios turísticos que se localizan en Frontera Corozal, municipio de Ocosingo, pues son considerados como los sitios imperdibles, por ello son promovidos en conjunto con las zonas arqueológicas de Bonampak y Palenque.
“Hay que recordar que la comunidad de Frontera Corozal cerró por temas de seguridad, entonces esta reapertura significa que hay mejores condiciones o que se han tomado las medidas necesarias, seguramente con el apoyo de las autoridades, entonces para nosotros es muy importante porque forman parte de las grandes zonas arqueológicas de Chiapas”, enfatiza.
Asegura que para apoyar a las familias que dependen de esta actividad, incorporarán a la brevedad posible las zonas de esparcimiento natural a los itinerarios, ya que a pesar de que los recorridos para llegar al sitio son largos, los turistas buscan conocer y tener contacto con la naturaleza que ofrece la Selva y que es considerada única en su tipo.
Los prestadores de servicios turísticos reportan que hasta ahora los centros turísticos y zonas arqueológicas a los que aún no pueden acceder son Lagos de Colón, ya que por su cercanía con la zona de la Sierra, los bloqueos y enfrentamientos hacen imposible el tránsito.
ksh