La Casa del Migrante de Saltillo dio a conocer que vecinos de la colonia República le han denunciado presuntas quejas de los migrantes que esperan su deportación en el centro de detención temporal local del Instituto Nacional de Migración, ya que de acuerdo a los testimonios se han escuchado lamentos y hasta golpes provenientes del interior del lugar.
“Nos han llamado vecinos de la colonia República a la Casa del Migrante de Saltillo, para decirnos que es muy común que en las noches se escuchen gritos, que se escuchen lamentos y que se escuchen inclusive golpes, es lo que nos han reportado”, expuso Alberto Xicoténcatl, Director de la Casa del Migrante.
El centro de detención temporal de Saltillo del INM se encuentra ubicado en la calle Colima de la Colonia República Oriente, y según el Director de la Casa del Migrante aclaró que el organismo no tiene posibilidad de acudir al centro por lo que desconocen de primera mano qué es lo que está sucediendo, sin embargo, sí han dado parte a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para que inicie una indagatoria al respecto.
“A través de llamadas telefónicas a la Casa los vecinos nos han enterado, sí creemos que esté sucediendo, pero no tenemos capacidad de comprobarlo porque es una estancia cerrada, “lo que hemos hecho es dar aviso a la Comisión Nacional de Derechos Humanos de que existen estos reportes, para que ellos puedan investigar”.
Recordó que la última llamada se recibió entre tres o cuatro semanas atrás, “desgraciadamente no tenemos una oficina cercana a Saltillo y la más cercana está en Torreón”, aceptó que tampoco han logrado documentar el testimonio de algún migrante dado que este es un centro del que salen deportados a sus lugares de origen y no se tiene contacto con ellos posterior a la detención.
“Lo que sí hemos documentado y se hizo una queja ante la CNDH es en la Estación Migratoria de Piedras Negras”, expuso; dijo que en este caso no se ha implementado una queja en el caso de Saltillo porque al ser una estancia provisional las personas presumible afectadas se quedan muy poco tiempo y en contraste el proceso de queja es largo, por lo que frecuentemente los migrantes ya abandonaron el país para cuando se llega a requerirles.
EGO