Aun y cuando autoridades y gobiernos realizan acciones para fomentar una cultura de reciclaje, existe todavía falta de desconocimiento por parte de la sociedad, principalmente en lo que corresponde a los residuos eléctricos y electrónicos.
A diferencia del papel, el plástico, aluminio, el vidrio, así como otros materiales, los desechos eléctricos y electrónicos contienen sustancias y metales que requieren de un tratamiento especial, debido a que algunos de ellos son de gran valor.
Susana Estens de la Garza, directora de Medio Ambiente en el municipio de Torreón, señala que los residuos electrónicos como la mayor parte de lo que se utiliza diariamente se puede separar en partes y se puede reciclar, sin embargo resulta complicado debido a que están compuestos de diversos tipos de materiales.
Señala que existen plásticos que tienen sustancias que son inflamables, otros que son tecnológicos de diferentes componentes y otros que se consideran peligrosos debido a que son resistentes a la flama o que por sí mismo emiten de manera constante ciertos vapores de los que la sociedad no es consciente.
Si bien es cierto, no se garantiza que se aproveche en su totalidad los residuos, consideró que es la vía más positiva, ya que es común ver en las calles que por irresponsabilidad se sacan los desechos de televisores, computadoras u otro tipo de artículo que luego de desarmarlo va a parar en algún terreno baldío en donde en ocasiones se le prende fuego o queda al aire libre, generando contaminación y afectación al medio ambiente y a las personas
“El medio ambiente es un tema de responsabilidad compartida, desde que compramos un objeto nosotros tenemos que tener presente que vamos hacer con el empaque, cómo vamos a disponer de este empaque y cómo vamos a disponer de este producto al final de su vida útil”.
La titular de Medio Ambiente en Torreón, consideró que no toda la responsabilidad debe ser cargada al consumidor, sino que hay una tendencia en Europa a través de un movimiento y leyes que se han puesto en práctica denominado “Responsabilidad ampliada del producto”, en la que el fabricante tiene que recuperar todos sus productos una vez que llegan al fin de su vida útil.
“Si el fabricante de refrescos puso en el mercado un millón de envases, ese millón de envases lo tiene que recuperar y demostrar que lo recuperó mediante diferentes mecanismos”.
De acuerdo a la legislación ambiental, hay tres tipos de residuos, que son: Los peligrosos que son de competencia federal; los residuos sólidos urbanos para los que se contrata una empresa encargada del acopio, barrido y disposición final, que son de ámbito municipal y los residuos de manejo especial que son de competencia estatal, sin embargo es el municipio se ve impactado por esos residuos y no establece algún mecanismo para que puedan llegar a una mejor disposición.
Es por eso que el municipio de Torreón a través de la dirección de Medio Ambiente, entre las acciones que realizan, es contar con un espacio para que los particulares puedan disponer de estos residuos eléctricos y electrónicos.
Es a la Secretaría de Medio Ambiente del Estado a la que se le hacen llegar los desechos eléctricos y electrónicos, quien a su vez los hace llegar a empresas dedicadas al manejo de este tipo de residuos. Aseguró que la respuesta de la ciudadanía ha sido positiva, ya que en el centro de acopio que se tiene en el municipio, diariamente se reciben residuos electrónicos, además de que se brinda información y orientación a través de las redes sociales de la dependencia y en las campañas que se llevan a cabo en las instituciones educativas.
No hay respuesta
En el caso del municipio de Lerdo, falta cultura y más información, ya que las campañas que se han realizado para que la gente lleve los desechos electrónicos, no han tenido respuesta. Ricardo Díaz Segovia, titular de la dirección de Medio Ambiente y Ecología en el municipio, manifiesta que la dependencia a su cargo recibe los desechos y se envían a una empresa para que se le dé el manejo adecuado a los residuos.
“Falta que la gente se entere que aquí nosotros recibimos todo lo que ellos desechan como son computadoras, televisores, calculadoras, entre otros”.
Lamentó que a pesar de los llamados constantes que se hace a la ciudadanía, hagan caso omiso y ese tipo de desechos los ponga en el bote de la basura que son recolectados y tienen como destino el relleno sanitario.
“Aquí permanente, tenemos en la oficina un contenedor en donde los pueden depositar y nosotros a su vez los llevamos cada semana a las empresas para que ellos los reciban”. El municipio de Lerdo tiene convenio con una empresa, que es la encargada de recibir todos los desechos eléctricos y electrónicos.
“Lo que más nos traen son lámparas que ya no utilizan, son las que llevamos directamente a la empresa y ellos le dan el tratamiento que debe ser”.
Expuso que es necesario que la gente conozca el daño que hace este tipo de residuos y sepa a donde llevarlos, ya que se han presentado casos en los que a causa de estos desechos las personas dedicadas a la pepena han tenido accidentes.
La campaña que tiene el municipio de Lerdo es permanente, por lo que reiteró el llamado para que acudan los ciudadanos a dejar tirada la basura electrónica y evitar que tenga como destino los terrenos baldíos en donde puede generar un daño al medio ambiente. En el caso del municipio de Gómez Palacio, informó que los residuos que son depositados en los contenedores ubicados en la dirección de Ecología, al interior del parque La Esperanza, son entregados a una empresa que es la que les da un destino final adecuado.
Afectación al medio ambiente
Anselmo Orona, biólogo de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), señala que a pesar de que existen centros de acopio para los residuos eléctricos y electrónicos, no tienen la capacidad ni el personal suficiente para darle un manejo adecuado. Si bien es cierto, dijo, la cultura ciudadana es importante, sin embargo muchas de las veces la basura electrónica permanece mucho tiempo en estos lugares expuestos al aire libre.
“Vemos que tienen filas de residuos electrónicos que la gente lleva, pero no pasan de ahí aún estando confinados o expuestos, pues están al aire libre o en tierra fértil y en su momento no hay una forma adecuada para disponer de esos residuos eléctricos electrónicos”.
La mayoría de las personas no tienen el conocimiento sobre el daño que representa para la salud este tipo de desechos eléctricos y electrónicos, por lo que fácilmente la depositan en los botes de basura, aún y cuando el sistema de limpieza en los municipios no se hacen cargo de el reciclaje y la disposición de estos residuos.
El manejo y confinamiento de este tipo de residuos, resulta costoso, debido a que los aparatos eléctricos y electrónicos tienen que ser destinados a lugares de confinamiento especial ya que muchos de ellos tienen elementos que pueden ser reutilizables, pues en el caso de una computadora tiene ciertas partes de oro y otro tipo de materiales que pueden ser reutilizables o bien metales que pueden causar efectos dañinos a la salud.
“Se han hecho estudios en donde los metales pesados que están dentro de la tabla periódica y que se usan comúnmente para la elaboración de artefactos eléctricos y electrónicos tienen efectos adversos a la salud”.
En el caso del plomo, es uno de los metales que se encuentra en los aparatos eléctricos y electrónicos que causa afectaciones en el sistema nervioso, reproductivo, anemias u otro tipo de afectaciones. Este tipo de residuos que es abandonado en lugares no propicios, resulta preocupante debido a que no son degradables, por lo que al estar en el suelo llegan a los mantos acuíferos generando una afectación en el agua que al consumirla provoca en el ser humano efectos dañinos en su salud, comentó Anselmo Orona.
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