Debido a las amenazas por parte de los integrantes del grupo social MAIZ, presuntamente vinculado al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), en las últimas horas cientos de habitantes de las comunidades Nuevo Sinaí, San Antonio El Ocotal y Cuatro Caminos, municipio de Chicomuselo, Chiapas, han abandonado sus hogares.
Los grupos criminales continúan provocando enfrentamientos en la zona de la Sierra.
A través de videos difundidos en redes sociales, los pobladores han denunciado que la organización social ha iniciado el reclutamiento forzado y ha obligado a los habitantes a unirse a sus filas.
Además, hombres armados han provocado balaceras que han cobrado la vida de inocentes y forzando a la población a dejar sus hogares.
“Nos encontramos aquí refugiados en esta comunidad, estamos dejando nuestros hogares, dejamos a nuestras familias por culpa de los del MAIZ y el Cartel Jalisco, que ellos vienen a apoderarse de nuestras tierras, nos están despojando de todo, ellos están obligando a meternos con ellos y si no cedemos matan a nuestras familias, están matando a niños, a mujeres, a todos los inocentes y yo al gobierno le pedimos que haga justicia”, expuso.
Las familias han escapado por las veredas y las montañas cercanas a sus localidades, llevando algunos costales y bolsas de plástico con las pocas pertenencias y ropas que pudieron sacar tras la violencia generada por los grupos criminales.
En las montañas, algunos pobladores se han solidarizado llevando agua y alimentos para los desplazados.
En otro video, una mujer que también huyó junto con dos personas más de la Sierra rompe en llanto y señala: “Como pudimos nos corrimos para el monte, no sacamos nada, venimos sin nada”.
Mientras tanto, en otro video grabado también por los pobladores, se escuchan de manera consecuente las detonaciones de armas de alto calibre en kilómetros a la redonda de sus viviendas, mientras que las personas lloran y permanecen escondidas para evitar ser alcanzadas por las balas.
Hasta ahora, los habitantes de comunidades de Chicomuselo no tienen permitido ingresar a la cabecera municipal, por lo que han huido y buscado refugio en otros municipios como Comitán, Tzimol y Socoltenango, ya que los alimentos también comenzaron a escasear.
El éxodo de las familias de la Sierra ha continuado después del desplazamiento masivo que se registró el 17 de enero, donde se contabilizó por lo menos unas dos mil personas.
Activistas y defensores de derechos humanos han informado que durante los dos últimos días también han huido otras dos mil personas de comunidades como Galicia, 20 de Noviembre y El Cerecillo.
La Red por los Derechos de las Infancias y Adolescencias en Chiapas (Redias) informó que durante el período 2023 y enero de 2024 han contabilizado al menos 19 mil 729 niñas, niños y adolescentes perjudicados por la violencia criminal.
Esta situación se ha agudizado con los hechos ocurridos en Maravilla Tenejapa y Ocosingo presentados anteriormente, sumando un total de 31 mil 710 niñas, niños y adolescentes afectados en sus derechos más básicos como la vida, el acceso a la alimentación, la vida en familia y el acceso a la salud.
Hasta ahora, las autoridades no han manifestado su postura con respecto al desplazamiento masivo de las familias de la zona Sierra, quienes comenzaron a vivir el calvario desde 2021 y cuyos hechos delictivos han ido en aumento en este año.