A fin de poner en marcha un nuevo plan que permita reducir el riesgo de inundaciones en Tabasco, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) destina 211.2 millones de pesos para realizar estudios de ingeniería básica, de impacto ambiental y análisis costo-beneficio, para conocer los alcances de los proyectos para la construcción y rehabilitación de la infraestructura de protección ante el desbordamiento de presas, ríos y arroyos frente a los ciclones tropicales.
“Existe la necesidad de infraestructura y acciones en algunos sitios estratégicos ante la alta frecuencia de fenómenos hidrometeorológicos extremos que generan altas precipitaciones, formando escurrimientos extraordinarios, cuyos ríos con muy poca pendiente llegan a desbordar o cambiar de cauce formando meandros e interconectando cuerpos de agua e interconectando cuerpos de agua como ríos y lagunas, lo que genera enormes áreas de inundación, provocando la pérdida de bienes de los habitantes de la región y suspensión de servicios, así como afectaciones en áreas productivas”.
Lo anterior se indica en la ficha técnica del Programa de Estudios de preinversión del Proyecto Integral de Manejo del Agua en Tabasco (PIMAT), presentada por el Organismo de Cuenca Frontera Sur de la dirección de Conagua en la entidad, que establece el arranque del proyecto desde enero para concluir en diciembre de este mismo año.
Como parte de los estudios de ingeniería básica se llevarán a cabo cuatro estudios: topográfico, que tendrá una inversión de 58.6 millones de pesos; hidraúlico, con un costo de 44.7 millones; de geotecnia, con un monto de 54.4 millones, y de proyectos de infraestructura de protección con una inversión de de 28.8 millones de pesos.
En tanto que en estudios específicos, se realizará un estudio legal que tiene un costo de 6 millones de pesos, el estudio de impacto ambiental cuesta 11.7 millones y el análisis de costo- beneficio tiene un monto destinado de 6.9 millones de pesos.
“Con la realización de los estudios básicos y los proyectos considerados se podrá contar con los elementos necesarios para encauzar y controlar los ríos, y realizar las obras de infraestructura hidráulica necesarias para la protección a centros de población y áreas productivas que está demandando la población del estado de Tabasco”, indica el programa de estudios de preinversión, autorizado por Felipe Irineo Pérez, director local de Conagua en Tabasco.
Se indica que con estos estudios, no existe traslape o duplicidad en los costos y beneficios del Proyecto Hidrológico para Proteger a la población de inundaciones y aprovechar mejor el agua en el estado de Tabasco (Prohtab), ya que los alcances de las actividades y sus trabajos son independientes.
Ciclones tropicales y frentes fríos dejan 226 mil viviendas inundadas en 2020
La interacción de cinco ciclones tropicales y seis frentes fríos entre octubre y noviembre de 2020 dejaron un saldo de 226 mil 608 viviendas inundadas en Tabasco, estimándose en 747 mil 806 habitantes damnificados directamente, así como pérdidas de miles de millones de pesos que siguen estimándose, tanto a la población como al sector productivo.
“Las avenidas extraordinarias que se presentaron en los meses de octubre y noviembre de 2020 transitaron de tal forma que rebasaron la capacidad de la infraestructura de protección, y al ser una llanura de gran extensión y con escasa pendiente, los volúmenes desbordados cubrieron extensas superficies, provocando cortes de vías de comunicación que dejaron incomunicadas localidades, varias poblaciones sufrieron inundaciones severas, además se presentó afectación a infraestructura urbana y rural, social y productiva”.
De acuerdo con la Conagua, en Tabasco escurre el 30 por ciento del agua del territorio nacional, mientras que un 60 por ciento de su superficie es acuática.
La Conagua reiteró que las grandes inundaciones han existido históricamente en la planicie tabasqueña, en la parte baja de las cuencas de los ríos que conforman el Sistema Usumacinta y que abarca los municipios de Centro, Cunduacán, Jalapa, Macuspana, Nacajuca, Balancán, Tacotalpa, Teapa, Jonuta, Centla, Emiliano Zapata, Huimanguillo y Reforma en Chiapas. Algunas de las inundaciones más severas han ocurrido en los últimos 20 años: 2001, 2007, 2008, además de 2020.
DMZ