La desaceleración que conllevan las medidas sanitarias que se aplican ante la presencia del el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que provoca la enfermedad covid-19 obligan a replantear el valor de los productos alimenticios de primera necesidad.
En ese sentido, la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro mantiene las puertas abiertas a la población que requiera asesoría y plántulas para iniciar un huerto familiar, sea en la zona rural o en la ciudad.
Este esquema forma parte de un proyecto permanente y por citar un ejemplo, durante el año anterior se trabajó con el ayuntamiento de Matamoros para instalar huertos en escuelas, mismos que fueron administrados por los propios alumnos quienes pudieron acopiar una gran cantidad de alimentos.
“He estado trabajando con el municipio de Matamoros, con el doctor Piña, con su gente ahí, entonces nosotros les proporcionamos plántula para los niños para establecer huertos escolares. El año pasado se instalaron y fue un éxito y ahorita lo que teníamos era plántula porque íbamos a continuar con ese proyecto. El problema fue que se nos vino esta situación”, estableció doctor Vicente de Paúl Álvarez Reyna.
Encargado del departamento de Riego y Drenaje de la UAAAN Unidad Torreón, Álvarez Reyna dijo que, estableció que asimismo han recibido solicitudes del municipio de San Pedro de las Colonias a través de la regidora Iris Cervantes quien pidió plántulas y raquetas de nopal para el establecimiento de huertos familiares en las comunidades más necesitadas. Lo mismo hizo la diputada Miroslava Sánchez.
Al momento en que se busca el apoyo de los expertos de la UAAAN, se les entregan pequeños brotes de plantas de tomate, chilaca, planta de chile jalapeño, lechuga y hasta repollo, lo que impulsa además volver a un esquema de alimentación más sano en un tiempo en que el cuidado de la salud se vuelve imprescindible.
“Sí estamos donando planta pero principalmente para las comunidades rurales y urbanas. La idea principal es que la gente produzca sus propios alimentos, variar y tratar de mejorar la alimentación de estas comunidades. El nopal es una planta que soporta las condiciones de la región y que solo de estar regando está produciendo continuamente y ayuda a la dieta alimentaria de las poblaciones marginadas”.
Dentro del invernadero, el doctor refiere que la plántula ha sirvió además para un programa que se realizó en colaboración con la Sagarpa (ahora Sader) en lo que se denomina huertos escolares.
“Teníamos todo lleno. Aquí tenemos plántula de chile, en este caso ésta es chilaca que se otorgaba a las comunidades; hay de chile habanero y tuvimos pepino y lechuga. Ahora hay sandía, tomate, calabaza y chile jalapeño, que nos ha ido quedando. Se están aprovechando las plántulas ante la situación que tenemos ahorita, donde es difícil trabajar”, explicó.
El doctor Álvarez Reyna, precisó que si a la población se le entrega semilla lo más probable es que no la siembre, pero si se le entrega la plántula harán el trasplante que puede ser en botes de acero o plástico si en las ciudades se queda. En el caso de los ejidos, casi todas las viviendas cuentan con traspatio y buena tierra y pueden implementar la hortaliza en el suelo.
De cualquier forma los expertos de la UAAAN pueden brindar asesoría para que si de los huertos urbanos se trata, sean aprovechados los espacios que se tienen, utilizando recipientes de desecho o bolsas de plástico negras gruesas donde se trasplanta el cultivo y se le da un seguimiento normal hasta la producción.
Estos productos básicos, dijo, se pueden vender o intercambiar, generando bienestar entre las familias. En ciclo primavera verano se pueden sembrar y cultivar tomate, chile, melón, sandía, lechuga, rábano, acelga, espinaca, calabazas y el nopal. Y en invierno los cultivo que se pueden instalar en La Laguna son la lechuga, repollo, cebolla y brócoli, entre otros.
“La idea era para los huertos pero nos ha estado llegando la gente, viene y piden 10 plantitas, 5 de esto, y con todo gusto si hay plántula disponible les entrego. Preguntan y con todo gusto podemos atenderlos. Aquí ando desde las ocho de la mañana y hasta las seis de la tarde”.
EGO