Cada año, el territorio mexicano se ve afectado por la formación de huracanes en el océano Pacífico, el Golfo de México y el Mar Caribe, vulnerando a varios estados costeros. Aquí te decimos cuándo empieza la temporada de ciclones tropicales y que zonas son las más afectadas en nuestro país.
¿Cuándo empieza la temporada de huracanes en México?
La temporada de huracanes comienza en mayo y termina en noviembre aproximadamente, cada año. Sin embargo, existen variantes que pueden alterar las condiciones de los océanos y presentar algunos cambios en la formación de ciclones tropicales.
Por ejemplo, en el océano Pacífico se pueden formar huracanes desde el 15 de mayo y en el Atlántico hasta el mes de junio, todo esto depende de las temperaturas de la superficie del mar.
Christian Domínguez Sarmiento, investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, indica que existen alrededor de 12 ciclones en promedio cada año en el océano Atlántico y alrededor de 16 ciclones por temporada en el océano Pacífico.
¿Qué estados son los más afectados por huracanes?
Los científicos de la UNAM indican que durante el 2024, los estados que mayor preocupación generan durante la temporada de huracanes son: Guerrero, Colima y Michoacán, debido al fenómeno ‘El Niño’.
Sin embargo, existen otros estados donde hay una gran probabilidad de presentarse un ciclón tropical que penetre el territorio, durante los meses de septiembre y octubre por el océano Pacífico, como:
- Baja California Sur
- Sinaloa
- Oaxaca
- Jalisco
Por el lado, en el Golfo de México y el Mar Caribe, los estados más afectados por la formación de ciclones se presenta durante los meses de agosto a octubre:
- Quintana Roo
- Veracruz
- Tamaulipas
En algunas ocasiones, los sistemas no alcanzan categoría de huracán y son llamados tormentas tropicales, un fenómeno climático que ocurre con más frecuencia. Esto puede ocasionar daños graves en las zonas pobladas como inundaciones, deslaves y avalanchas de lodo, en zonas costeras como tierra adentro.
¿Cómo se forma un huracán?
Los huracanes son afectaciones cuyos vientos dentro del mismo sistema son muy intensos y al mismo tiempo, ocurre la velocidad de traslación, es decir, el tiempo que le toma a un ciclón tropical llegar de un lugar a otro.
En años recientes, los huracanes estacionarios se han vuelto más peligrosos debido a su crecimiento exponencial. Al ser estacionarios, producen más lluvias sobre un mismo lugar durante un período más largo de tiempo, produciendo daños a la infraestructura y la vida humana.
Sin embargo, es importante mencionar que la lluvia no está asociada con la intensidad de un ciclón.