El desafuero del titular de la Fiscalía de Morelos, Uriel Carmona Gándara, realizado por los diputados del Congreso de la Unión, resulta ser una medida tardía, ya que los delitos que se le imputan han prescrito. No obstante, el funcionario puede ser aprehendido al carecer de protección constitucional.
Omar Alexandro López, ex agente del Ministerio Público en Morelos, sostiene que, a pesar de la información disponible sobre el fiscal morelense, la defensa del funcionario tiene validez al afirmar que el proceso legislativo para remover su inmunidad procesal se asemeja a una persecución política, pues los delitos en los que se basa la determinación datan del 2018.
Tras el rechazo del Congreso de Morelos de destituir al fiscal, dejándolo a disposición del Ministerio Público federal como solicitó el Congreso, López fue claro al afirmar que "no es que se defienda al fiscal", sino que las acciones están mal ejecutadas.
El especialista respalda la decisión del Congreso local que, esta madrugada del jueves, se negó a destituir al Fiscal, ya que los fundamentos legales para retirarle el fuero no están contemplados en la constitución local como delito, como es el caso de la falta de exámenes de control y confianza.
Considera que la solución legal para resolver el conflicto de versiones y perspectivas legales será una controversia constitucional.
MO