La ciudad de Guasave, enfrenta una crisis humanitaria luego del desbordamiento del río Sinaloa provocado por el paso de la tormenta tropical Ileana.
Las intensas lluvias, que se prolongaron por más de 30 horas, dejaron como saldo miles de viviendas dañadas y más de 25 mil personas afectadas en el municipio.
Las zonas rurales y urbanas fueron gravemente afectadas, mientras que las autoridades locales trabajan sin descanso para atender a las familias damnificadas.
El alcalde de Guasave, Martín Ahumada Quintero, informó que entre 4 mil y 5 mil viviendas en la zona urbana resultaron afectadas, lo que impactó a más de 20 mil personas directamente en la ciudad.
A nivel municipal, la cifra de damnificados se eleva a 25 mil personas. Los barrios más golpeados incluyen las colonias:
- 6 de Enero
- Tierra y Libertad
- Renato Vega
- Jardines del Valle
- 17 de Mayo.
En las zonas rurales, la situación es igualmente crítica, con mil 286 viviendas afectadas y cerca de 5 mil personas damnificadas, distribuidas en comunidades como:
- El Zopilote
- Portuguez de Gálvez
- La Trinidad
- Y otras localidades en la sindicatura Benito Juárez
El panorama es desolador, con calles inundadas, casas anegadas y familias enteras sin hogar.
Las labores de rescate y saneamiento avanzan lentamente debido a la magnitud del desastre, pero las autoridades municipales y estatales han desplegado un operativo masivo para limpiar las zonas afectadas y prevenir brotes de enfermedades.
Hasta el momento, se retiraron 46 toneladas de escombros y cacharros de las áreas impactadas, en un esfuerzo por evitar criaderos de mosquitos transmisores de enfermedades como el dengue.
Despliegue de recursos y atención a damnificados
Para enfrentar la emergencia, el gobierno local movilizó 18 vehículos, incluidos camiones, volteos y trascabos, con la colaboración de distintas áreas como Parques y Jardines, Servicios Públicos y la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guasave (Jumapag).
Estas labores están centradas en las zonas más afectadas, con el fin de restablecer los servicios esenciales y garantizar la seguridad de los habitantes.
Las familias afectadas están siendo atendidas en albergues temporales, mientras las autoridades reparten despensas, cobijas y colchonetas.
Los refugios fueron fundamentales para ofrecer resguardo temporal a aquellos que han perdido sus hogares o no pueden regresar debido al alto nivel de agua.
Uno de los principales centros de atención es el refugio Luis Estrada, donde varias familias esperan el traslado de vuelta a sus comunidades. Otros damnificados, como los del sector 6 de Enero, ya comenzaron a regresar a pie a sus hogares para evaluar los daños.
Las autoridades, en conjunto con el gobierno federal, iniciaron un censo para identificar a todas las familias afectadas y distribuir ayuda a través de los Programas del Bienestar.
Daños en infraestructura y servicios
Además del impacto en las viviendas, la tormenta Ileana dejó severos daños en la infraestructura de Guasave.
La red eléctrica fue gravemente afectada, dejando a muchas comunidades sin electricidad ni agua potable durante varios días. El colapso de postes y la caída de árboles en zonas como Adolfo Ruiz Cortines y Correrepe agravaron la situación, dificultando las tareas de reparación.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) trabaja de la mano con las autoridades locales para restablecer el servicio en las áreas afectadas lo antes posible.
En el ámbito de las comunicaciones y el transporte, la tormenta también provocó el descarrilamiento de un tren de carga en la sindicatura de Estación Naranjo, lo que dejó a tres trabajadores heridos.
Este accidente, causado por el reblandecimiento del terreno, resultó en el descarrilamiento de 18 vagones. Los heridos fueron trasladados al hospital en Guasave, donde se reportan estables, mientras que el Ejército mexicano activó el Plan DN-III para asistir en la rehabilitación de la vía.
Afectaciones en el ámbito educativo
La tormenta no solo afectó hogares y servicios básicos, sino también el sistema educativo. La escuela primaria "Justo Sierra", en el municipio de Guasave, sufrió graves daños debido a los fuertes vientos y la intensa lluvia.
La techumbre, los aires acondicionados y las ventanas del plantel fueron destruidas, dejando a los 276 estudiantes de los turnos matutino y vespertino sin un lugar donde recibir clases.
Las autoridades educativas decidieron reubicar a los estudiantes en una escuela secundaria cercana mientras se realizan las reparaciones necesarias.
Protección Civil comenzó a evaluar los daños en el plantel, y se espera que, tras un análisis exhaustivo, se determine si será necesaria la demolición de la techumbre o si puede ser rehabilitada.
MO