El 3 de mayo es celebrado el Día de la Santa Cruz, como un culto al descubrimiento de este símbolo cristiano, en una celebración proveniente de un rito romano.
La fecha también es llamada Fiesta de las Cruces o Día de la Cruz de Mayo, sin embargo, al paso del tiempo el oficio de maestro de albañilería lo adoptó como un día de celebración, con una reunión y un guiso ofrecido comúnmente por el mismo patrón de la obra, siempre con una cruz adornada con flores en lo más alto de la construcción.
En un oficio que requiere de esfuerzo físico considerable, además de soportar las inclemencias del tiempo como las altas temperaturas en La Laguna, ser albañil representa para muchos, un oficio de toda la vida.
Incluso hay ‘maistros’ que han seguido el paso de sus padres, quienes les enseñaron desde pequeños los gajes del oficio que después adoptaron como propio, tal como la historia de José Luis Rodríguez, quien comparte que tuvo como maestro al mejor de los mentores en albañilería, su padre.
Con más de 40 años de albañil, José Luis, también llamado “El Indio”, recuerda que estuvo con su padre en la construcción de colonias de Gómez Palacio como La Esperanza, Fovissste, El Campestre, Castellanos y demás construcciones, con lo cual ha mantenido a su familia y a sus cuatro hijos, de los cuales tres mujeres son profesionistas al tener a una enfermera, una contadora y una estilista.
“Mi padre fue mi mejor maestro en este oficio. Yo no me quise dedicar a otra cosa, lo mío es pegar ladrillos y con eso he sacado adelante a mi familia y tengo tres hijas que tienen estudios”.
SUS MANOS COMO MEJOR HERRAMIENTA
Su mejor herramienta en cada construcción han sido sus manos, sin embargo como toda herramienta tiene sus afectaciones al pasar el tiempo, ya que reflejan el desgaste por manejar de todo tipo de material, donde el ladrillo ha sido como una lija en sus manos hasta llegar a borrar las huellas dactilares de cada uno de sus dedos.
En cambio, se puede apreciar en cada palma de la mano lo áspero de la piel, con pequeñas callosidades y grietas que reflejan el trabajo de cuatro décadas en la obra.
“Mis manos son el reflejo de miles de ladrillos que he trabajado. ‘Wuacha’ lo que hace en las manos, es como una lija. Es más, si me piden las huellas digitales les digo que no las traigo, ya se me borraron”.
Por su parte Enrique Rosales, también conocido como el “Wero”, tiene más de 35 años en la obra y su especialidad es ser ‘botero’, es decir, el albañil que se coloca una base en la cabeza tipo gorro y se dedica a subir por las escaleras cientos de botes con cemento, que llegan a pesar alrededor de 40 kilogramos cada uno.
El Wero comparte que este oficio puede llegar a ser muy pesado, pero las recompensas son muchas y que mejor que terminar bien su trabajo y así ser recomendado para otros proyectos.
Festejo de la Santa Cruz
José Luis explica cómo celebran el Día de la Santa Cruz, en el que una comida que comúnmente ofrece el encargado del lugar donde se labora, con una tradicional discada, refrescos y cerveza, en esta ocasión, con su debida distancia.
La música no puede faltar, ni en plena obra, con las cumbias y ocurrencias del “Zorro” en la radio, mucho menos en el festejo de la Santa Cruz, donde resuenan canciones norteñas, de banda, cumbias y sin duda, la canción “El Albañil”, de Carlos y José.
¿De donde proviene el Día de la Santa Cruz?
Según versiones católicas un 3 de mayo del año 326 después de Cristo fue hallada la Santa Cruz por Helena, esposa del emperador romano, Constancio Cloro y madre del posterior emperador, Constantino de Roma.
En México, se dice que los agricultores hacían ceremonias en mayo para pedir buenas cosechas, rito adoptado a los constructores ya que pasaron de un oficio a otro sin dejar de rezar a la Santa Cruz.
La palabra “albañil” proviene del árabe “albanní”, que a su vez viene del árabe clásico banna “constructor)”.
EGO