Por quinto día consecutivo se mantiene el caos y la inconformidad afuera de las oficinas de la Secretaría del Bienestar en Lerdo, cuando alumnos de educación media superior, acompañados de sus padres, esperan de 48 a 72 horas su turno para inscribirse en las becas "Benito Juárez".
La fila comienza en la puerta principal de acceso a este complejo de edificios públicos, sobre la calle Chihuahua, donde se aprecia un gran cartel con los requisitos que deben tener en mano los aspirantes a este beneficio. De ahí se extiende y da vuelta a la calle Juárez hasta llegar casi al bulevar Miguel Alemán.
Un grupo de alumnos y padres de familia acaba de salir sonriente, pero en su rostro también se ve el agotamiento, son aquellos alumnos de preparatoria o bachiller que estuvieron en fila desde el martes y tuvieron la suerte de dar de alta su registro.
Julio Olguín Nabor, padre de familia de un joven que estudia en el CBTIS 147 de Gómez Palacio, señala que él llegó a la fila desde las 23:00 horas del pasado jueves y lo que apenas ha logrado avanzar son dos metros, pues asegura que existe una total desorganización donde nadie informa nada, ni se soluciona el retraso del registro.
Dijo que en lo particular, solicitó permiso en el trabajo, en tanto que entre él y su hijo se turnan para mantenerse en la fila, un rato uno a la intemperie, sufriendo frío y cansancio, mientras que el otro se iba al coche para descansar y así sucesivamente, pues temen perder la posibilidad de acceder al beneficio que supera los 800 pesos mensuales durante un periodo de diez meses y que mucho le ayudarán en el gasto de autobuses y materiales escolares que demanden.
De esta manera, son cinco días consecutivos con los que cierra la semana en esta problemática que comenzó el lunes pasado, en que se abrió el periodo de inscripción a las becas “Benito Juárez”, donde el caos, el enojo y desesperación no ha cesado, sin existir una información oficial que les permita tener la certeza de que de volver otro día tendrán garantizado su acceso.
"Hay gente que tiene hasta tres días aquí y no se les resuelve; se arma una lista, luego otra, se modifica la última y así el tema se prolonga, lo que propicia el enojo de los padres de familia que están obligados a acompañar a sus hijos y se ha vuelto un problema muy grave, pues unos como yo tenemos que pedir permiso en los trabajos y en otros casos de madres solteras, tienen que dejar a sus demás hijos encargados con un familiar o un vecino”, dijo.
Pagan de 150 a 300 pesos la renta por noche
Sobre la calle Chihuahua, destaca la instalación de una casa de campaña, la cual pertenece a Francisco Palma, un jovencito de apenas 16 años que vio con esta problemática la oportunidad de hacer negocio, pues desde el miércoles renta tres casas de campaña a familias que se quedan aquí a dormir, la chica para dos personas en 150 y las grandes en 300 la noche, ya que las noches son frías cuando el termómetro ha bajado de ocho hasta cuatro grados centígrados.
Además dice que vende refrescos, agua embotellada y otros alimentos, pues la gente no puede retirarse por temor a perder su lugar.
Ahí, sentada afuera de la casa de campaña está Gilda Reyes, quien asegura que desde el miércoles por la noche llegó a la fila y ya está por llegar, pues le toca ingresar en la siguiente ronda a fin de poder accesar y dejar sus datos, sin embargo, dijo que el argumento que les dan es que el sistema nacional está fallando y la plataforma se cae, además no cuentan con personal suficiente.
Sin embargo, ello no le quita el enojo por la marcada desorganización que ha prevalecido en esta registro de becas del Bienestar, sobre todo cuando considera que es un trámite innecesario, pues recordó que en la pandemia se manejaron los registros a través de plataformas digitales debido al confinamiento, por lo que detalla y se cuestiona que si el modelo resultó y fue eficaz, porqué ahora están obligando a un nuevo esquema que sólo genera incomodidad.
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