Un 20 por ciento de las 146 bibliotecas con que cuenta el Estado de Coahuila requieren algún tipo de mejora, y algunos de los problemas que presentan son filtraciones de humedad en techos y renovación de cableado eléctrico; informó la Dirección General de Bibliotecas en la entidad.
Gustavo Cantú Castañeda, coordinador de Bibliotecas en el Estado sin embargo, resaltó que hoy en día se tienen operando 127 bibliotecas, ya que 19 de ellas no han podido abrir por diferentes razones; no obstante recordó que el año pasado en la reapertura se tenían alrededor de 70 bibliotecas que no podían abrir ya que tenían “un montón de fallas estructurales”.
Aclaró que en términos generales los edificios continúan operando, aún con estas necesidades, que agregó se deben más a la antigüedad de los mismos: “yo creo que tiene que ver con la antigüedad del edificio donde están ubicadas”; no obstante, aceptó que también la generalidad requieren algún tipo de apoyo.
“Yo agregaría que también necesitan la donación de libros actuales, a lo mejor vamos a sugerir que se implemente un programa municipal, de manera que pueda hacer algo nuevo".
La que más cerca está de abrir es una biblioteca de Múzquiz a la que sólo le faltaba la instalación del aire acondicionado pero éste ya está por lo que en este mes se estaría abriendo, en tanto que una en Ramos el Cabildo invirtió para hacer modificaciones pero aún no está terminado.
Otro caso es el del municipio de Arteaga en donde hay cuatro comunidades con bibliotecas que están cerradas debido a que no se tiene personal local; y la biblioteca de la Alameda Zaragoza en Saltillo que ya no cuenta con lámparas para alumbrar a los visitantes, ya que las rachas de aire que afectaron la ciudad provocaron cortos circuitos y 21 equipos de cómputo se dañaron así como la totalidad de los focos.
“La biblioteca va a estar operando con luz natural nada más, y sólo con consulta física, las bibliotecas públicas en general son municipales y todo lo que tenga que ver con remodelación es con cargo a municipio”, explicó.
Otra que ha sido cerrada es la de Landín, donde constantemente se han robado el cableado eléctrico ya que se introducen indigentes y otras personas que perpetran los robos, por lo que se requiere en este caso una vigilancia constante.
EGO